EFE
La fiebre del Valle del Rift, que afecta a las provincias nigerinas de Tassara y Tchintabaraden, en la región de Tahoua (centro del país) ha causado la muerte de 25 personas hasta el pasado 25 de septiembre, según cifras del gobierno nigerino.
Los datos fueron comunicados en una rueda de prensa por el secretario general del ministerio de Sanidad, Idrissa Mamoudou Maiga, junto a quienes se encontraban los ministros de Sanidad y de Ganadería.
Al ofrecer estas cifras, el secretario general dijo que trataba de alertar «contra las fuentes no autorizadas que vehiculan informaciones infundadas sobre la epidemia».
Según Mamoudou Maiga, la declaración de estado de alerta del ministerio de Sanidad ha conseguido reducir considerablemente la mortalidad de la epidemia: así, si antes de la alerta hubo 17 muertos de los 23 casos declarados, al declararse ésta el 29 de agosto, los 50 nuevos casos solo se han traducido en ocho nuevas muertes.
Las autoridades sanitarias han puesto a disposición de los enfermos los medicamentos necesarios, han reforzado a sus agentes en zonas de riesgo y han emprendido una campaña de comunicación para apoyar los necesarios cambios en los hábitos de conducta.
Concretamente, el secretario general exhortó a la población a evitar los desplazamientos de animales desde las zonas infectadas a las no infectadas, y viceversa; hervir la leche antes de su consumo; evitar el contacto directo con animales enfermos; enterrar al ganado muerto con precaución y contactar con las autoridades sanitarias en cuanto se sientan sospechas de infección.
