Sara Pacheco

Hace una semana, estimó Tulio Barrios, se dañó la alcantarilla que divide las avenidas Michelena y Alejo Zuloaga, en la urbanización El Trigal en la parroquia San José. Por la vía circula gran cantidad de camiones de carga pesada, pues cerca hay una estación de servicio. Presumió que uno de estos vehículos hizo sucumbir la rejilla.

Las consecuencias no han parado. Diariamente, otros automóviles sufren por no distinguir desde lejos lo que se avecina. Cauchos desinflados es solo una de las afecciones, que hoy día, duele en el alma a cualquier conductor, por razones conocidas: inflación y escasez.

Pero Tulio aseguró que siempre sucede lo mismo en la urbanización. “Pasa. Últimamente solo esta, pero en años anteriores sucedía de manera constante”. Agregó que deben pasar hasta meses para su reparación.

Hasta el momento ninguna autoridad se ha presentado al sitio, los habitantes cercanos fueron los que decidieron señalizar con ramas el hueco.




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