Felícita Blanco
El comerciante José Gregorio Pérez (55) fue asesinado por unos delincuentes que lo asaltaron en su residencia y luego le
prendieron fuego, el domingo en el sector Mata de Caña, Las Mayas, parroquia
Coche.
Pérez vendía
jugos naturales en el mercado de Coche, vivía solo, sin hijos y era muy apreciado por su comunidad. A las 9
de la noche del domingo los vecinos
observaron que salía humo de la casa del comerciante y notificaron a sus
familiares.
Lo hallaron muerto
en su cuarto, con un disparo en la cabeza, de manos y pies atados, y una funda
de almohada cubriéndole el rostro. Los familiares creen que los
vecinos no escucharon ruidos durante el robo-asesinato porque estaban viendo el
juego de béisbol. Además la regadera de la ducha estaba abierta y creían que
Pérez se estaba bañando.
El comerciante acostumbraba a invitar a sus amigos a
compartir en su casa, era muy sociable. Creen
que los victimarios son conocidos que viven en la misma comunidad, y entraron
con la autorización de Pérez porque no observaron signos de violencia en la puerta.
Después de
adueñarse de dinero, televisor, prendas y demás objetos de valor, rociaron el
cuarto con un líquido inflamable y le prendieron fuego. Las
llamas consumieron parte de la habitación y el cuerpo de Pérez presentó ligeras
quemaduras producto de las gotas de petróleo que cayeron del techo.
“Todos los días vivimos peor, expuestos a la inseguridad”,
lamentó Raquel Gamboa, sobrina del comerciante.
Las autoridades colectaron una serie de evidencias para
tratar de identificar a los victimarios. En el sitio hallaron una lata de
vensol, líquido que rociaron en el cuarto para quemarlo.