Brasil suele ser uno de los países de América Latina más representados en los rankings mundiales de las mejores universidades del mundo. Y cuando compite contra toda la región, se luce aún más.

Así lo refleja el primer ranking de universidades latinoamericanas elaborado por la publicación británica Times Higher  Education (THE), especializada en educación y conocida por sus listados universitarios mundiales. En este listado Brasil es el líder indiscutido de Latinoamérica.

Como lo es en Europa la Universidad Francesa de Tecnología que no tiene profesores. Es una universidad gratuita para programadores y desarrolladores de software creada en París, Francia, en 2013. Tiene grandes diferencias con otras universidades: está abierta las 24 horas del día, los siete días de la semana y no tiene profesores. ¿Cómo aprenden los alumnos si no tiene profesores? Kwame Yamgnane, uno de los cuatro fundadores, explicó a BBC Mundo que en vez de contratar profesores, aplican el «peer to peer learning», es decir, el aprendizaje entre compañeros.

En la edición latinoamericana del ranking de THE aparecen 50 universidades y se basa en los indicadores de rendimiento que se mencionan en el párrafo siguiente, igual que el listado mundial, que abarcan desde la proporción entre estudiantes y el personal académico, hasta la influencia de la universidad a nivel internacional.

Los indicadores de rendimiento se agrupan en las siguientes áreas: • Enseñanza (el entorno de aprendizaje) • Investigación (volumen, los ingresos y la reputación) • Las citas referenciales (influencia de la investigación) • Perspectiva internacional (factor humano académico, estudiantes y la investigación) • El resultado de la industria (transferencia y aprovechamiento del conocimiento) • Proporción del número de profesores por estudiantes  • Doctorados concedidos a la proporción de recurso humano académico • Ingresos institucionales • El resultado de investigación • La productividad de investigación • Internacional – la proporción de estudiantes internacionales y los nacionales– • Relación –la relación del recurso humano docente Internacional con el doméstico–• La colaboración internacional • Ingresos de la industria (transferencia de conocimiento).

Brasil encabeza los primeros dos puestos, posee la mitad de las universidades en el top diez y detenta 23 de los 50 centros educativos listados en total. En los primeros dos lugares del ranking se encuentran la Universidad de Sao Paulo y la Universidad de Campinas, ambas ubicadas en el estado de Sao Paulo. Dicho país vuelve a aparecer dentro del top diez en los puestos cinco (Universidad Federal de Río de Janeiro), seis (Pontificia Universidad Católica de Río de Janeiro) y siete (Universidad Federal de Minas Gerais).

Entrevistada por THE, Carolina Guzmán-Valenzuela, investigadora del Centro de Investigación Avanzada en Educación de la Universidad de Chile, explicó que el éxito de Brasil -a nivel universitario- se debe a sus publicaciones de calidad, su elevada producción de patentes y su alta inversión en investigación y desarrollo en relación al producto bruto interno (1,15%).

Por su parte, Javier Botero Álvarez, especialista de educación superior para América Latina del Banco Mundial, dijo a THE que las universidades públicas de Brasil sobresalen por dos factores: una elevada financiación estatal y un selecto sistema de elección de estudiantes.

Las mejores universidades de América Latina: 1.-Universidad de Sao Paulo (Brasil); 2.- Universidad de Campinas (Brasil); 3.- Pontificia Universidad Católica de Chile (Chile); 4.- Universidad de Chile (Chile); 5.- Universidad Federal de Río de Janeiro (Brasil); 6.- Pontificia Universidad Católica de Río de Janeiro (Brasil): 7.- Universidad Federal de Minas Gerais (Brasil): 8.- Instituto Tecnológico de Monterrey (México); 9.- Universidad Nacional Autónoma de México (México) y 10.-Universidad de los Andes (Colombia). Las universidades venezolanas mejor ubicadas son la Universidad Simón Bolívar (USB) en el puesto 31 y la Universidad de Los Andes (ULA) en el 41

El liderazgo educativo de Brasil en la región se mantiene a pesar del estancamiento actual de la economía de ese país y los recortes de financiamiento que están sufriendo las universidades estatales.

El país que le sigue a Brasil en representación es Chile. Además de ubicarse en los puestos número tres (Pontificia Universidad Católica de Chile) y cuatro (Universidad de Chile), abarca 11 de las 50  universidades del ranking. Muy de cerca le sigue México, con diez de  cincuenta y con dos universidades dentro de las primeras diez:  el Instituto Tecnológico de Monterrey (ocho) y la Universidad Nacional Autónoma de México (nueve).

La Universidad de los Andes, de Colombia, cierra el ranking del top 10. Instituciones educativas de Costa Rica, Perú y Venezuela también consiguieron ingresar al listado.

De acuerdo con Botero Álvarez, las universidades de Brasil, Chile, México y Colombia se volverán cada vez mejores, alcanzando los rankings mundiales en los próximos años. No obstante, de todas las universidades latinoamericanas listadas, sólo la Universidad de Sao Paulo se encuentra en la última edición del ranking THE de las 300 mejores del mundo.

Según THE, dado que se proyecta que la población de América Latina aumentará una cuarta parte para 2050, alcanzando las 780 millones de personas, la educación superior sigue siendo una prioridad para muchos países de la región.

La estadística clave son los datos suministrados por las mismas instituciones en relación a las clasificaciones de las universidades del mundo. Esto representa datos a partir del año 2013 académico, y puede variar a partir de años subsecuentes o más tempranos.

Entre la estadística clave figuran: estudiantes, son el número de ellos a tiempo completo en la Universidad; proporción de número de estudiantes a tiempo completo equivalentes al número de profesores -aquéllos dedicados exclusivamente a la enseñanza o la investigación-; estudiantes internacionales el porcentaje de estudiantes que provienen de fuera del país donde está establecida la universidad; la proporción de hembras a estudiantes masculinos en la Universidad.

Las clasificaciones de las universidades en el ranking mundial es analizada con base en la transparencia y la responsabilidad a través de todas sus codificaciones. Los datos suministrados crean las Clasificaciones Mundiales de Universidad y la cartera de los regionales y clasificaciones definitivas provienen de tres fuentes: veracidad de los datos del estudio de reputación anual académico del THE; datos institucionales suministrados directamente por las universidades de recolección segura de datos, y datos bibliométricos proporcionados por Elsevier (institución especializada en la divulgación de conocimiento científico), de su base de datos. Scopus (recopilación de bases de datos de resúmenes y artículos de revistas científicas arbitradas). Estos datos se combinan para formarse los 13 indicadores de funcionamiento que suelen crear las Clasificaciones Mundiales de Universidad.

Respecto de Venezuela, hay  “¿universidades”? (como las de donde egresan los Médicos Integrales Comunitarios: MIC) en las que se ve que muchos de ¿“los profesores”? que imparten una asignatura son los estudiantes que ya pasaron en el lapso lectivo anterior por tal temática y ¿”enseñan”? a quienes vienen detrás de ellos: ¿con cuál “experiencia médica” pueden sostener sus afirmaciones si aún no se han graduado y -por ende- ¡no han tenido praxis en ello! y -consecuentemente- cómo responder asertivamente a las preguntas que les interpongan sus “discípulos”?, ¿con cuál formación formal cuentan para impartir pedagógicamente? Una cosa es ser un “preparador” y otra muy distinta ser un “profesor”: en definitiva, ¿cuál es y será la calidad de esos MIC, cuál es el futuro médico venezolano? (¡Que Dios, Cristo y la Virgen nos amparen y nos libren de todo mal y peligro: amén..!). Finalmente, ¿cómo incluir a tales “universidades” en la edición latinoamericana del ranking de THE?




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