Luis Alejandro Borrero | @LABC7
Su actitud fue tranquila. Vio al Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y ya sabía que venían por él. El alcalde Delson Guarate entró a la oficina con los funcionarios. Pidió una sola cosa: poder dirigirse a su familia y compañeros de trabajo antes que se lo llevaran. La mañana de este viernes fue detenido el alcalde de Mario Briceño Iragorry, en Aragua.
En el vídeo minutos antes de su detención, el alcalde aparece en un salón del ayuntamiento. Sostiene una biblia en la mano. Allí, su mensaje es claro: “Hemos decidido dar la cara”, dijo el coordinador regional de Voluntad Popular. “Tendrán que llenar los estadios para meter al pueblo entero. Esta lucha es de todos los venezolanos. Estamos dispuestos a dar la vida por Venezuela”, agregó en el patio de la alcaldía cuando se lo estaban llevando. La gente lo rodeaba.
La casa del alcalde, en La Candelaria, estaba siendo allanada por el Sebin. José Gregorio Hernández, secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en Aragua, calificó la detención como la confirmación de la persecución política que tiene el gobierno de Tareck El Aissami contra opositores. “Nos esperábamos esto”.
ANTECEDENTES
Mario Briceño Iragorry es un municipio de apenas 54 kilómetros cuadrados. Único —junto con San Sebastián de Los Reyes— municipio opositor de Aragua. El Consejo Federal de Gobierno había aprobado los recursos para entregar más de cinco compactadoras de basura para complementar los esfuerzos. Pero el alcalde Guarate había denunciado que los camiones habían sido “secuestrados”, por el gobernador.
Pero en octubre de 2014, en un acto de la Misión Vivienda, El Aissami fue claro: “Asumo el compromiso de este alcalde fascista. Yo no voy a abandonar al pueblo ¿Qué quiere ese alcalde, que me venga yo mismo con una pala a recoger la basura?”, dijo ante una multitud de chavistas contenta por el anuncio de la construcción de casas. Allí amenazó a Guarate por, según él, ser promotor del fascismo y la ineficiencia. El Aissami reconoció en ese acto del 17 de octubre que el objetivo fundamental: la alcaldía, no se había logrado.
A partir del 22 de octubre se inauguró un plan de saneamiento del gobierno regional, según reseñó el portal gubernamental AVN. Pero la crisis sanitaria en Mario Briceño fue inevitable para 111 mil personas. Sin las compactadoras, de las que en una oportunidad El Aissami habló como suyas, no se podía limpiar. “El gobernador hablaba de las compactadoras como si fueran de él, que no se las iba a mandar a Guarate por ser opositor”, ilustró Hernández.
El Consejo Legislativo, dominado por el oficialismo, creó el Instituto Autónomo para el Desarrollo de Mario Briceño Iragorry. Lo presidiría el general Víctor Flores Urbina, quien perdió las elecciones contra Guarate en diciembre de 2013. El organismo recibió recursos directos de la gobernación para la limpieza del municipio, pero tampoco resolvió el problema. En las calles de Caña de Azúcar y El Limón (las dos parroquias) se podía acumular hasta 800 toneladas de basura. “Es cuestión de tiempo. Vendrán los tiempos de victoria aquí en Mario Briceño, queridos concejales (chavistas), querido Víctor Flores, queridas UBCH”, dijo El Aissami en octubre de 2014.
En octubre de 2015, en un acto transmitido por Venezolana de Televisión, el entonces presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, arremetió contra Guarate. “Tu condición de inepto está puesta de relieve en toda Venezuela. Es tu responsabilidad recoger la basura, para eso el ejecutivo te aprueba un presupuesto, no para pagar propagandas políticas y campañas electorales. A ti te va a sacar el pueblo”. Pero no fue el pueblo, sino el Sebin.
En febrero de 2016 El Aissami recibió en su despacho a una comisión de la nueva Asamblea Nacional. Adriana Pichardo, diputada por Aragua, dijo que el gobernador se comprometió a entregar los recursos del Fondo de Compensación Interterritorial (FCI). “El gobernador aclaró desconocer la solicitud que hiciera el alcalde Delson Guarate ante el FCI, que hoy le adeuda seis compactadoras y 250 contenedores de basura. Ante tal situación el gobernador se comprometió a realizar una jornada de saneamiento y recolección profunda en el municipio en un plazo de 30 días y velar por la entrega de la maquinaria que pertenece a la alcaldía”.
EL TEMOR DE LA MUD
José Gregorio Hernández estaba en la sede del Sebin en Maracay cuando recibió una llamada. Eran familiares de Guarate. Alertaban que mientras el alcalde estaba preso, se realizaba un allanamiento a la vivienda de su familias. El secretario de la MUD comentó que le informaron que los agentes del Sebin ingresaban con bolsas negras y maletines a la residencia de Guarate. “Tememos que le puedan sembrar algo”.
La dirigencia opositora está reunida evaluando próximas acciones. Prevén que a Guarate se le imputen delitos ambientales, porque desde hace más de dos años reposan en fiscalía documentos de denuncias contra el opositor en lo que Hernández denominó como un juicio para castigar a Guarate por opositor y coordinador de Voluntad Popular.
En 2014 Guarate también fue objeto de denuncias por parte de El Aissami. Le acusó por los robos masivos a más de 30 comercios en Mario Briceño Iragorry durante las protestas antigubernamentales denominadas “La salida”. La oposición no descarta hipótesis en el motivo de la acusación que se haga en las próximas horas.
Durante la detención no fue entregada ninguna orden de captura ni de allanamiento, dijo Hernández. “Es una persecución, una escalada en contra de dirigentes de la Unidad. Sabemos que es una excusa”. El dirigente también cree que Guarate podría ser culpado por la toma de Maracay de más de mil 500 motorizados que causaron destrozos y robos colectivos. “Es una manera intencional del Gobierno, pero todo el mundo en Aragua sabe que las bandas de delincuentes actuaron como una filial del gobierno regional. El Aissami es responsable por acción u omisión de lo que pasó”.
