AFP

Laurent Blanc dejó
su puesto de entrenador del Paris SG después de tres temporadas en el cargo,
anunció este lunes en un comunicado el conjunto parisino, que no precisó las
condiciones económicas de la salida del técnico galo.

El periódico
L´Equipe había afirmado el jueves que Blanc rescindiría su contrato con el
campeón francés a cambio de una indemnización de 22 millones de euros. El
probable sucesor de Blanc es el español Unai Emery, que anunció a mediados de
junio que dejaba el Sevilla, con el que conquistó tres temporadas consecutivas
la Europa League (2014, 2015, 2016).

Llegado al PSG en
2013, Blanc logró dos veces el póquer de títulos en Francia (Liga, Copa, Copa
de Francia, y Trofeo de Campeones), sumando un total de 11 títulos con el
conjunto de la capital. Pero el exdefensa internacional, campeón del mundo en
1998, pagó sus fracasos en Liga de Campeones, donde no logró superar los
cuartos de final.

«En un
ambiente calmado, las dos partes han llevado a cabo conversaciones que han
derivado, este lunes 27 de junio, en la firma de un acuerdo que preserva el
interés de las dos partes», explicó el PSG en un comunicado.

Este anuncio
oficial pone término a una novela con un final sospechado desde la entrevista
concedida por el presidente catarí del PSG, Nasser Al Khelaïfi, el 3 de junio
al periódico Le Parisien.

 «MALA TEMPORADA»

Dos meses después
de la traumática eliminación en cuartos de final de la Liga de Campeones por el
Manchester City, Al-Khelaïfi prometió «grandes cambios» en el club,
mostrándose «muy decepcionado» tras la «mala temporada» realizada.

La gran
indemnización a Blanc es consecuencia de la decisión del club de prolongar el
pasado mes de febrero el contrato del técnico durante dos años más, antes de
los octavos de final de la Liga de Campeones ante el Chelsea.

La cuantía del
montante de su finiquito provocó una polémica la semana pasada, cuando el
presidente del Olympique de Lyon, Jean-Michel Aulas, estimó
«indecentes» las cantidades, señalando que «perjudican la imagen
y la ética del fútbol francés».

«Cuando uno es
francés, paga sus impuestos como todo el mundo; cuando uno es catarí, creo
entender que no hay las mismas reglas fiscales», indicó Aulas.

Unas acusaciones
rechazadas por los propietarios del PSG, que respondieron que no se
beneficiaban de «ningún trato fiscal particular o privilegiado».

Según los medios españoles
la oferta realizada a Emery es «imposible de rechazar».

Pero a pesar de sus
éxitos con el Sevilla, el fichaje de Emery plantea dudas: su falta de
experiencia y títulos fuera de España (sólo dirigió unos meses al Spartak de
Moscú), así como la incógnita de cómo lidiará con un vestuario plagado de
estrellas.

Tampoco en Liga de
Campeones dispone de un palmarés reseñable, eliminado con el Sevilla la
temporada pasada en primera ronda, un fracaso que le permitiría sin embargo
conquistar meses después la Europa League.

 




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