El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pidió este viernes que «nadie se vuelva loco» tras la suspensión del proceso hacia el referendo revocatorio que impulsa la oposición contra él.
Sin mencionar expresamente el revocatorio, Maduro llamó «a la tranquilidad, al diálogo, a la paz, al respeto a la justicia y al acatamiento de las leyes, a que nadie se vuelva loco».
«Que no vuelvan a los tiempos de la locura», dijo el mandatario en un contacto telefónico con la televisora gubernamental desde Azerbaiyán, donde inició una gira de cuatro días que también le llevará a Irán, Arabia Saudita y Catar.
Maduro recordó así los meses de conflictividad política tras el golpe de Estado de abril de 2002 contra el fallecido Hugo Chávez, su antecesor en la presidencia.
«No vengan a echarle una broma a la Navidad (estropearla) de los venezolanos este grupo de irresponsables que dirige la derecha», agregó el gobernante socialista.
Este viernes, el líder opositor Henrique Capriles convocó para el próximo miércoles a una movilización nacional para «restituir el hilo constitucional» luego que fuese suspendida la recolección de cuatro millones de firmas requeridas para la convocatoria a la consulta, lo que calificó como un «golpe de Estado».
El Consejo Nacional Electoral (CNE) paralizó el jueves el trámite, que estaba pautado para la próxima semana, tras fallos de tribunales regionales contra el proceso por un supuesto fraude en un primer recaudo de rúbricas para solicitar el referendo.
Maduro viajó a Medio Oriente para buscar -según dijo- acuerdos con países petroleros que estabilicen los precios del crudo, fuente del 96% de las divisas de Venezuela.
