Dayrí Blanco|@DayriBlanco07
La recuperación del Guri sigue. El propio ministro de Energía Eléctrica, Luis Motta Domínguez, se ha encargado de anunciarlo con números, datos y fotos. El lunes la cota del embalse amaneció en la cota 248,21 metros sobre el nivel del mar (msnm), lo que quiere decir que está por encima de la 248 que bajo promesa del vicepresidente de la República, Aristóbulo Istúriz, se traduciría en el fin del racionamiento implementado desde el 25 de abril de manera oficial. Pero no ha sido así. Los apagones programados y otros sobrevenidos continúan.
En promedio la pendiente sube 28 centímetros (cm) al día, lo que significa que el sábado cuando la cota era de 247,65 msnm ya se podía calcular que a partir de este lunes los números estaban dados para acabar con el Plan de Administración de Carga (PAC). Pero no se ha dado hasta ahora ningún anuncio de cambios en este esquema de ahorro energético.
El ministro Motta Domínguez dio otras proyecciones. A través de su cuenta en twitter aseguró la noche del domingo que se debe mantener el ahorro y el consumo eficiente porque la meta es llegar a la 271.
Fue el 4 de abril de 2016 cuando la central hidroeléctrica de Guri, proveedora del 63% de la energía eléctrica del país, alcanzó la cota mínima histórica desde su construcción y puesta en servicio hace 48 años al llegar a los 243,94 msnm, un registro inferior a los dos mínimos registrados en los anales de la tercera central hidroeléctrica más grande del mundo, el 10 de mayo de 2003 cuando la cota se situó en 244,55 y el 11 de mayo de 2010 cuando la caída del embalse se detuvo en la 248,08 metros.
Especialistas han reiterado que eliminar el programa de racionamiento sería una medida apresurada. El sector residencial representa 60% de la demanda nacional y con una hidrología desfavorable y las plantas termoeléctricas a menos del 60% de su capacidad se tiene un cóctel cuyas consecuencias convergen en que Guri no se recupere lo requerido y se vuelve a poner en jaque seguridad energética del país.
Se tiene previsto que en octubre entre en el sistema meteorológico nacional el fenómeno natural La Niña que causa el efecto contrario a la sequía intensa de El Niño. Para ese momento es cuando el embalse podría llegar a la cota 260 que es el nivel en el que se puede eliminar por completo el racionamiento.
