Dayrí Blanco/@DayriBlanco07

Las maniobras políticas para entorpecer el proceso revocatorio contra el presidente Maduro solicitado por la oposición no han sido suficientes. Los lapsos legales son claros y aún hay tiempo para activar el mecanismo este año. Octubre sigue siendo la fecha planteada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) y todavía es posible.

Tres días hábiles aprobó el Consejo Nacional Electoral (CNE) la tarde del jueves, para realiza la verificación de los recaudos entregados por la oposición el martes 12 de abril. Pero es un tiempo que se convierte en 12 días al contar los no laborables por decreto presidencial. 
Tomando en cuenta los viernes libres de la administración pública y que retornarán a sus labores el miércoles 20, los rectores tienen ese día, el jueves 21 y el lunes 25 para hacer la respectiva revisión de los documentos y las 2 mil 40 firmas consignadas. Se espera que el martes 26 sean entregadas las planillas, solo si no se dictamina ninguna objeción. 
«Pero no hay que bajar la cabeza ni descansar«, alertó el diputado a la Asamblea Nacional (AN) y coordinador regional de Primero Justicia (PJ), Marco Bozo, quien recordó que previo a las parlamentarias del 6 de diciembre fueron diversos los obstáculos y todos se superaron. «No nos querían ni dar la fecha para las elecciones, pero la presión funcionó y logramos el objetivo».
Muestra de debilidad 
La oposición no está ante ningún escenario de derrota, aseguró el diputado a la AN, Juan Miguel Matheus. «Cada obstáculo que nos ponen en el camino es una prueba de debilidad del Gobierno». 
El parlamentario calificó como una maniobra de distracción y operación morrocoy el actuar del CNE, pero «no nos vamos a dejar vencer por el miedo y el terror electoral que representa Tibisay Lucena«.
Aún con las planillas en la mano el martes 26, para recoger el 1% de las firmas del Registro Electoral (RE) necesarias para activar la convocatoria del referendo, el revocatorio se celebraría al comienzo del último trimestre del año y 30 días después se activaría la elección presidencial, todo antes del 15 de diciembre, cuando el ente comicial comienza su período vacacional. 
Matheus es optimista. Sin importar que se impongan otras trabas como la rectificación de firmas del 1% y las del 20% del RE que se deben recolectar posteriormente para la activación definitiva del mecanismo de cambio de Gobierno, todo será posible este año. La idea es evitar que llegue 2017 porque de ganar la MUD el revocatorio, el vicepresidente culminaría los dos últimos años del período de Maduro y no se celebrarían elecciones. 
Desde PJ ya se tienen establecidos 65 puntos distribuidos en los 14 municipios del estado que gozan del aval del resto de los partidos de oposición en la región. Este fin de semana se activarán unos centros de información especiales que servirán para censar a la población que desea revocar el mandato presidencial.

Ante las puertas cerradas de la oficina regional del CNE un grupo de militantes de partidos opositores se concentraron para exigir la entrega de las planillas. Nadie los recibió. Los viernes son no laborables para la administración pública.




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