El serbio Novak
Djokovic, N°1 del mundo, venció por 6-3, 5-7, 6-2 y 6-1 a Jerzy Janowicz, aunque se
lo notó incómodo y con dolores en el brazo derecho. El serbio no la pasó nada
bien en su debut en el US Open, pero pudo salir con una sonrisas por su
victoria en cuatro sets. Posibilidad de rearmar su juego, seguramente alguna
atención médica y listo para un nuevo desafío en Nueva York.
Además, también hubo
victorias de Milos Raonic y Marin Cilic, dos que llegan como amenazas a
Flushing Meadows.
«En esta época
del año es difícil mantener el físico». Palabras cortas de Novak Djokovic
en la entrevista post partido, luego de imitar a Phil Collins y tratando de
llevar la atención hacia otro lado.
Malas señales desde
el inicio para Novak Djokovic, quien arrancó el partido con una doble falta. No
obstante, un rápido 1-0 y doble chance de quiebre. Todo parecía bajo control,
pero aparecieron los problemas. Dos puntos de rotura en contra y, a pesar de salvar
la situación, atención médica en el 3-2 por un dolor en la parte posterior
-alta- del brazo derecho.
El serbio, pese a la
adversidad, recibió un guiño de Janowicz, que acumuló una serie de errores no
forzados y cedió su servicio. Con el 5-3, de todas maneras, Djokovic tuvo que
sacar adelante un doble punto de quiebre antes de cerrar el primer set. Nada
cómodo por el momento.
Y la segunda manda
evidenció aún más esto. El N°1 del mundo estuvo al límite al ceder su servicio
en el sexto game y quedar 2-4, pero de nuevo encontró un aire de esperanza
desde la irregularidad del polaco. Pero la historia no estaba del todo bien
para el serbio, quien, tras dejar chances de quiebre en el 4-4 y en el 5-5,
tuvo un game para el olvido con su servicio (revés a la red y ancho, doble
falta y derecha larguísima) y con claros síntomas de dolor en su brazo. Set
iguales.
El serbio debió ser atendido por molestias en su brazo derecho./Foto: AP
Djokovic tuvo un
comienzo ideal en el tercero, con un quiebre y una ventaja de 2-0. Su mejor
aliado fue si rival, que entró en un bache y le dejó todo en sus manos. Y otra
rotura más para el 4-1, incluso sin sentirse bien. Gestos, enfados, señales. El
serbio, incómodo en la cancha. De todas maneras, pese a pasar algunos
sobresaltos con su saque, pudo cerrar el tercero por 6-2 y quedó en buena
posición.
El cuarto, un calco.
El N°1 del mundo no forzó demasiado su físico, ni siquiera sacó con potencia, y
buscó solidez en su juego. Sus pocos errores no forzados llevaron al límite a
Janowicz, quien, viendo cómo la historia se le iba de las manos, se repitió en
fallas y terminó en una posición lejana para una reacción. Djokovic no perdonó
y firmó su pase a la segunda ronda, donde irá ante Jiri Vesely, uno de los
cinco jugadores que supo ponerle freno (en Montecarlo) en este 2016.
En tanto, el
canadiense Milos Raonic, quinto cabeza de serie y uno de los grandes
candidatos, empezó su camino con un gran 7-5, 6-3 y 6-4 ante el peligroso
alemán Dustin Brown, mientras que el francés Jo-Wilfried Tsonga, noveno
favorito, se impuso en sets corridos al argentino Guido Andreozzi, quien
llegaba con tres victorias desde la clasificación.
Tomado de
Espndeportes.com
