La obra de Edgar Negret, Horizonte Paisaje Agustiniano es
instalada en la ciudad por el mismo que el exalcalde Francisco “Paco” Cabrera
contrató para construirla a partir de la maqueta del artista colombiano, 14
años después.
En 2002, el exalcalde “Paco” Cabrera llegó a los talleres de
Emilio Fioravanti para darle la responsabilidad de transformar una maqueta de Negret,
titulada Horizonte Paisaje Agustiniano en una obra monumental que adornaría Valencia
y se convertiría en ícono cultural de la ciudad en toda Venezuela y el mundo,
recordó la Alcaldía de Valencia en una nota de prensa.
Fioravanti, que participa en la instalación, relata con orgullo
y alegría, la experiencia de ser parte de lo que hoy en día significa la
instalación que realiza la gestión de Miguel Cocchiola, de esa importante
escultura en el lugar para la cual fue pensada y adquirida.
Fioravanti narra que una vez le fue dada la maqueta y la
responsabilidad de materializarla, tardó cerca de dos años en la fabricación
dada la magnitud y tipo de material necesario. Cuenta que fue el mismo “Paco”
Cabera, conjuntamente con su equipo de trabajo en aquel entonces (2002) quienes
determinaron las dimensiones y lugar de colocación.
“Para mí es un logro personal que luego de tantos años, por
fin Valencia tenga un espacio tan importante, que la haga bonita, como existen
en otras ciudades de Venezuela, obras de esa magnitud, y estoy seguro que
permitirá que personas de otros lados vengan a apreciarla, fueron dos años de
buscar el material, construir cada pieza y luego unirlas de manera de ser
totalmente fiel a la maqueta de Negret”, exclamó.
Los cincos años que “Horizonte Paisaje Agustiniano” estuvo olvidada por la gestión anterior a
Miguel Cocchiola en sus talleres siempre se le trató con gran cariño y
dedicación, para evitar que sufriera un deterioro que pusiera en riesgo todo el
trabajo llevado a cabo. “Nosotros siempre le hicimos sus cuidados, sabíamos que
algún día llegaría una gestión que la rescatara y la instalara donde fue
pensada y para la cual le pusimos tanto empeño y dedicación”.
Fioravanti explicó que la instalación ha sido muy bien
pensada y se hace con la maquinaria necesaria y personal altamente calificado
para que todo salga como es y la obra sea preservada de manera que su vida útil
sea muy larga.
Cree que las futuras generaciones de valencianos sentirán un
gran apego y orgullo por esa importante obra, y si bien seguramente será
solamente recordada como una obra de Edgar Negret, para él significa un gran
logro ser el autor material o constructor como le gustaría ser conocido. “No sé
si mi nombre estará en la historia futura de la obra, pero para mí dejar un
granito de arena en hacer esa Valencia que soñamos, de esplendor, es mi mayor
satisfacción”. (AV)
