Sara Pacheco
Desde las fuertes precipitaciones que ocasionaron la caída de más de 10 árboles en la urbanización El Trigal, los habitantes de Trigal Centro han sufrido las consecuencias de la falta de mantenimiento a líneas viejas de alta tensión.
Cada vez que llueve, cuando se cae una rama o una línea, los vecinos pasan hasta ocho horas sin electricidad. Hoy decidieron protestar tras 48 horas en la oscuridad, las zonas más afortunadas solo tiene media fase.
Ana María Burguillos, explicó que han enviado cartas al Instituto Municipal del Ambiente solicitando la poda de árboles y a Corpoelec exigiendo al menos, inspecciones. En la mañana de este domingo una cuadrilla de la corporación acudió al lugar tras llamados realizados desde el pasado viernes. Sin embargo, dijeron a los vecinos que no podían solventar la avería por falta de material. “Ese fue el detonante, esa respuesta”, resaltó Burguillos.
Con ramas cerraron un tramo de la avenida Zuloaga. Con un megáfono y pancartas informaban a los transeúntes lo que pasaba, a su vez exigían una solución concreta para las más de 600 familias afectadas.
Luego de hora y media de protesta, arribó al sitio un nuevo grupo de trabajo de Corpoelec con una parte del material que solventaría el problema hasta la próxima lluvia. “Nos dijeron que si vuelve a llover, nos quedaríamos sin luz nuevamente. No es una solución, es un pañito de agua tibia”.