Unos nueve mil 500 feligreses se concentraron este domingo en el Forum de Valencia, para rendirle tributo a Nuestra Señora del Socorro, en ocasión de celebrarse su día. La misa concelebrada, que presidió el arzobispo Reinaldo Del Prette, contó con la participación de 61 sacerdotes, entre ellos cuatro monseñores, 91 seminaristas y ocho diáconos.
Las festividades en honor a la patrona de Valencia, cada día acumulan más seguidores, lo cual se pudo evidenciar, no solo en la misa del Forum, sino en la cantidad de personas que acompañaron la venerada imagen, en procesión hasta la basílica catedral.
La virgen estaba bella como siempre. Esta vez lució el traje que le bordó un grupo de damas valencianas, en ocasión de celebrarse el centenario de su coronación canónica.
La imagen llevaba sobre su cabeza una corona de oro y piedras preciosas, confeccionadas por la casa Cartier de París, en el año 1.910, según indicó el periodista Alfredo Fermín, uno de sus más fervientes devotos.
A la misa asistió el alcalde de Valencia, Miguel Cocchiola y su esposa Georgia, así como la alcaldesa de San Diego, Rosa de Scarano, y su esposo Vicencio «Enzo» Scarano. También estuvo el presidente de Fedecamaras Carabobo, Damiano Del Vescovo, los diputados Carlos Lozano y Juan Miguel Matheus, los ediles Mariela Domínguez y Manuel Molina, la ex concejal Gladys Valentiner y el secretario general de AD en Carabobo, Rubén Limas; entre otras personas.
El coro centenario estuvo dirigido por Lucía Montanari, quien incluyó un solo del niño Oscar Navea, que encantó a los asistentes.
Por pedido del Papa, monseñor Del Prette comenzó la homilía recordando que este domingo culminó el Jubileo de la Misericordia, el cual permitió poner en el corazón de los católicos, la verdadera imagen de Dios. Citó el mandatario de Jesucristo según el cual hay que amar a Dios sobre todas las cosas, y al prójimo como a uno mismo.
El prelado de la iglesia católica también incluyó el tema del diálogo en su intervención. Dijo que le parece bien que se produzca, porque la otra salida es la violencia lo cual nadie quiere. A su entender quien no tiene la verdad recurre a la violencia.
El arzobispo señaló que personalmente ha visto a madres buscando en la basura algo de comer para sus hijos, lo que no ocurría antes y no puede continuar sucediendo. Celebró que entre los acuerdos del diálogo se haya aprobado la entrada de ayuda humanitaria al país, porque mucha gente lo necesita.
Insistió en la importancia del diálogo, porque este método no se usó antes de la segunda guerra mundial, sino después que se produjeron miles de muertos. Lo mismo ocurrió en la guerra civil de Guatemala y durante 55 años de guerrilla en Colombia.
Monseñor Del Prette subrayó que quienes ven el diálogo desde afuera, lo observan como si fuera un juego de poder, donde el gobierno no quiere perderlo, y la oposición intenta asumir el poder. “No estamos poniendo la base, que es el venezolano y sus necesidades”, dijo.
Un gran aplauso recibió el arzobispo cuando señaló que las ideologías no llevan a ninguna parte, porque los pueblos no son capitalistas, marxistas, socialistas o comunista, sino personas.
Añadió que Venezuela siempre ha sido un país solidario, y no puede continuar permitiendo que sus jóvenes se vayan a otras naciones en busca de futuro. «Eso hay que detenerlo. El futuro no puede ser sin nuestros jóvenes”.
La procesión partió por la avenida Galicia, tomó la Bolívar hasta llegar a la Catedral por el bulevar Constitución. Todo transcurrió con normalidad e incluso una nube impidió que a los feligreses les pegara el fuerte sol del mediodía.
