EFE
El diputado opositor Ismael León denunció este lunes en la Fiscalía General a los dirigentes chavistas Jorge Rodríguez y Diosdado Cabello por su supuesta responsabilidad en la violencia que se suscitó cuando un grupo de simpatizantes del oficialismo irrumpió en el hemiciclo del Legislativo.
León, militante del partido Voluntad Popular -que rechazó participar en la mesa de diálogo entre el Gobierno y la oposición-, dijo que las decenas de personas que el 23 de octubre pasado irrumpieron en el Parlamento mientras se desarrollaba una sesión especial, lo hicieron «pagados» por el alcalde del municipio caraqueño Libertador, Jorge Rodríguez.
«Todos sabemos por los vídeos quiénes estaban detrás de este acto violento, nadie cree en ese show mediático donde Jorge Rodríguez aparece como mediador, porque muchas de esas personas son pagadas por la alcaldía de Caracas», dijo León a periodistas.
El diputado opositor del partido Voluntad Popular aseguró, además, que el también parlamentario Diosdado Cabello «tiene mucho que explicar» sobre este caso pues «él señaló que, si pudiera, hubiese acompañado a estos violentos en el ataque contra la Asamblea Nacional (AN, Parlamento)».
León también pidió al Ministerio Público (MP) que se investigue al coronel Vladimir Lugo, pues fue bajo su mando en la custodia del Legislativo que se permitió la irrupción de las personas afectas al chavismo en la sesión.
El pasado 23 de octubre en el Parlamento, de mayoría opositora, se discutía en una sesión especial las vías para una posible destitución del presidente venezolano, Nicolás Maduro, debido a la supuesta ruptura del hilo constitucional tras la suspensión del proceso para activar un referendo para revocarlo.
Ese día, mientras hablaba el primer vicepresidente del Legislativo, el opositor Enrique Márquez, empezaron a ingresar en el salón de sesiones varios hombres y mujeres casi todos vestidos de color rojo, portando fotografías del prócer Simón Bolívar y banderas de Venezuela.
Bajo el grito de «el pueblo unido jamás será vencido» varios de ellos lograron burlar las cuatro alcabalas que existen para ingresar al salón de debates del Parlamento, dos de ellas controladas por funcionarios de las Fuerzas Armadas.
Una vez dentro del foro, comenzaron los empujones principalmente entre el personal de seguridad del parlamento y los simpatizantes del oficialismo y se suspendió el debate por una media hora hasta que el grupo ajeno a la cámara abandonó el espacio.
Tras la irrupción de ese grupo, el alcalde oficialista Jorge Rodríguez también accedió a la Asamblea Nacional y, tras conversar con los chavistas, los conminó a abandonar el sitio, a lo que finalmente accedieron.
Voceros de la oposición han acusado al alcalde de haber sido quien coordinó este asalto y afirman que, por ello, el oficialista apareció rápidamente en la escena.
