Foto: Archivo

EFE

El español Jorge Lorenzo, que disputará su último gran premio al manillar de una Yamaha en el circuito Ricardo Tormo, ha reconocido hoy que tiene «una mezcla de sensaciones».

«Estoy ilusionado por intentar hacerlo lo mejor posible, por intentar luchar por la victoria, o al menos hacer un podio», señaló Lorenzo.

«Con ello aseguraría el tercer puesto, que significaría estar los últimos ocho años entre los tres primeros y eso significa mucho para mí, porque supone una consistencia súper importante ya que no siempre se puede ganar, pero es importante estar siempre delante, pero si lo consiguiese ya sería un gran resultado para mí», recalcó sobre una posible victoria.

De sus años en Yamaha, Jorge Lorenzo aseguró que «ha habido tantos buenos momentos, por fortuna, que es complicado elegir uno». «Seguro que me quedo con las primeras veces: la primera victoria o el primer Mundial son los más especiales», recordó.

«En el plano emocional recordaré toda la vida la carrera de Assen al volver después de 30 horas de una operación y hacer quinto, nadie lo ha hecho hasta ahora y no sé si volvería a hacerlo, porque no estoy tan loco, pero creo que ahora no se puede por reglamento», explicó el triple campeón del mundo de MotoGP.

En cuanto al fin de semana en el circuito Ricardo Tormo, Jorge Lorenzo dijo: «Nunca ha sido uno de mis circuitos favoritos cuando corría aquí en 125 y 250 c.c. y a partir de 2012 empecé a encontrarme más a gusto aquí. No hay ningún secreto que ser más rápido que los demás».

Al ser preguntado sobre su rendimiento en caso de lluvia, el piloto de Yamaha afirmó: «Uno nunca sabe cómo puede encontrarse en lluvia ya que cuando llueve te puedes encontrar muy bien, regular o muy mal. Además hay caídas, pero en agua hemos dado un paso adelante en general. Ya veremos».

«Todos preferimos carreras en seco, pero si lloviese habría que intentar darlo todo en nuestra última carrera con esta moto», recalcó Lorenzo.

«Hace un año no me imaginaba que esto podría suceder y estoy triste por dejar en el camino a personas con las que he estado muchos años, algunas más que otras, y también dejar una moto competitiva, y siempre ha habido buen ambiente, siempre he recibido una moto ganadora, siempre he conseguido victorias en todos los años que he estado», destacó Lorenzo de su paso por Yamaha.

«Por otra parte estoy ilusionado porque tengo 29 años y viendo la progresión de la otra moto, era el momento justo de afrontar este desafío», agregó.

En cuanto al comportamiento de Yamaha durante la temporada, Jorge Lorenzo aseguró: «Lo que me preocupaba era que la moto funcionase, y la moto ha funcionado. Si no he conseguido resultados muy constantes este año, no ha sido por parte de Yamaha».

«Siempre he recibido el mismo material que mi compañero de equipo y eso era lo que más me interesaba y lógicamente tengo contrato hasta el 31 de diciembre y eso hay que respetarlo», dijo Lorenzo en alusión a la negativa de Yamaha a que pruebe la Ducati en los entrenamientos de finales de noviembre en Jerez de la Frontera.

«Quizás hubiese sido más inteligente firmar otro tipo de contrato que me desvinculase en la última carrera del año, pero entiendo que si ellos me pagan hasta el 31 de diciembre, soy piloto de Yamaha»; incidió Jorge Lorenzo, que afirmó: «Yamaha me ha dado mucho y Lin Jarvis, que dice que esto es un negocio, tiene su razón y lo puedo llegar a entender».




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