Hoy el universo de la docencia, las artes y el humor perdieron a uno de sus más congruentes y veraces protagonistas.

La vida de Miguel Ángel Correa Feo,fue una combinación de sapiencia y carisma, con lo que se ganó el amor de los suyos, el corazón de los amigos y la admiración de sus alumnos.

Su entorno lo identifica como un admirable y enamorado esposo, padre, hijo, hermano, tío, maestro, amigo y un gran ser humano. A quien este lunes 17 de enero, cuando eran las 8:30 de la noche, en una reconocida clínica de Valencia,le llegó el momento para el cual se había preparado desde hace  4 años.

Su hermana Ana María Correa, relata con gran apego, que con mucha fe en Dios y salpicado de humor, siempre intentaba “burlarse” de la enfermedad.

“Él hacía chistes de cada momento difícil que le tocó enfrentar, y conello ayudó a su familia a aceptar y a sobrellevar el cáncer.Miguel Ángel decía que la enfermedad era una prueba puesta por Dios, y como  buen católico creía en la vida después de la muerte, por lo que siempre se impuso prepararse para su partida”.

Este caraqueño de nacimiento y valenciano de corazón, de gran formación académica dentro y fuera del país, cultivó varias virtudes, lo que alternaba con su especialidad de docente universitario y chef autodidacta.

El profesor Miguel Ángel alcanzó su jubilación como titular de la  Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Carabobo, tras 25 años en los que logró dejar en esas aulas ,la semilla delas artes, principios y valores humanos.

Para él la música, al igual que para el resto de su familia, siempre ocupó un sitio especial en su vida; amaba enseñar y comunicarse con todos, por lo que decidió crear su propia página en Facebook titulada: Los Chistes del Pobresor.

Fueron 55 años que vivió con una sonrisa en sus labios, por lo que cuando se supo de su pérdida, en las redes sociales hubo innumerables manifestaciones decariño y admiración, por un ser que se dedicó a educar y a ver la vida de una manera distinta, digna, valiente y optimista.

Sus restos fueron velados en la Funeraria Crepúsculo Norte de Valencia, y cremados para reposar en el Columbario de El Viñedo.Su esposa, su padre Juan Correa, hijos, hermanos y demás familiares invitan a su novenario en la Iglesia la Asunción y Santa Ritade la urbanización El Trigal. Paz a sus restos.




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