Hasta el momento solo ha sido identificado uno de los dos hombres hallados sin vida el pasado jueves, a un lado de la autopista que comunica a Valencia con la parroquia Güigüe, municipio Carlos Arvelo. Se trata de Argenis Romero, un agricultor de la zona, de 42 años de edad.
Su mujer, María Majín, estaba en la morgue este viernes reclamando el cadáver para darle cristiana sepultura. Sospecha que su marido fue víctima de una venganza, que habría perpetrado un ciudadano de apellido Aular, quien presuntamente estuvo preso en Tocuyito.
Majín ya hizo la denuncia en el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc). Detalló que el día que desapareció su marido, Aular fue a su casa a amenazar a la familia.
La dama, evidentemente afectada por lo ocurrido, dijo que reside en el sector La Colmena de Carlos Arvelo, donde tiene un sembradíó de quinchoncho, cambur, plátano y algunos tubérculos. Cerca de allí está una parcela que le pertenece a una señora que vive en Valencia, la cual presuntamente comenzó a ser invadida poco a poco por Aular.
Ellos se lo comentaron a la propietaria, lo cual al parecer incomodó a Aular, quien les reclamó en tono aireado y los amenazó de muerte.
El martes al mediodía, fue el último reclamo. Romero salió en la tarde a venderle quinchoncho a un vecino, para comprar azúcar y no volvió más. El jueves lo consiguieron muerto al lado de la autopista.
María Majín narró que visitó al vecino y éste le confirmó la venta, pero dijo que Romero había ido solo y se retiró de la misma manera. Desconoce la identidad del otro hombre muerto, que según fuentes extraoficiales sería de Guacara.
