Carta para los umpires,

a quienes nadie escribe

 

Coral Gables, Florida (VIP-WIRE).-

 

“La consciencia de los umpires es tan negra como sus uniformes”… Earl Weaver.-

 

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Amigos umpires de todo el mundo…:

¡Qué valor tienen ustedes!… ¿Cuál fue el pecado tan grave que cometieron como para dedicarse a esa profesión tan vilipendiada?  

Porque sin umpires no hay juego. Pero nadie recuerda que existen sino cuando sentencien algo sospechoso de ser errado. 

Las madres más mentadas en el mundo del deporte son las de Uds. Solo por haberlos traído a este mundo. O sea, es malo hacerse umpire, pero sin umpires es imposible cantar play ball.

Hemos tenido una Serie Mundial extraordinaria en este octubre, con nuevos nombres de bigleaguers elevados al máximo juego tras juego. Ellos eran 50, ustedes solamente seis. ¿Quién conoce esa media docena de nombres, qué periodista, narrador o comentarista dijo que lanzamiento tras lanzamiento sentenciaron lo correcto?

Al contrario, lo que inventan es cómo hacerlos quedar mal en público, como ahora con eso de la innecesaria revisión de los videos y en el futuro, que parece cercano, la automatización vía robots de la apreciación de bolas y strikes.

En el cerebro de Uds. y en los ojos, en las voces, en manos, brazos y piernas, descansa la calidad del juego de pelota. Es imposible ver una cuarteta o una sexteta de umpires hacer un mal trabajo colectivo. 

Eso no existe. He trabajado en más de siete mil 500 juegos de Grandes Ligas, algunos en Japón y centenares en México y El Caribe, y surgen equivocaciones aisladas de umpires por razones humanas. Pero nunca el fracaso de todo el grupo, ni nada cercano a eso.

No pretendo cambiar las cosas, a quien nace para clavo, del cielo le caen los martillazos, pero sí tengo interés en que se enteren de cuánto admiro y respeto lo que hacen. Me parece la labor más seria en el universo del deporte. Y cada vez mejor, gracias a las Academias en Estados Unidos, en El Carmen, Nuevo León; Dominicana, Puerto Rico, Japón y Venezuela.  

Les deseo lo mejor de lo mejor, y que periodistas, narradores y comentaristas los mencionen también, cuando realicen un trabajo acertado.

Abrazos, Juan Vené.

 

RETAZOS.- ** Una tarde, en Polo Grounds de Nueva York, cuando era la casa de los Gigantes, al aparecer los cuatro umpires del juego del día en el terreno, el organista dejó oír en todo el estadio una canción llamada “Los Cuatro Gatitos Ciegos”. Pues, Ios cuatro gatitos ciegos expulsaron al músico del parque por el juego de la fecha… ** Néstor Chylak, uno de los mejores umpires de las Mayores en los últimos tiempos, dijo…: “Quieren que los umpires seamos perfectos en el día inaugural… y que mejoremos a medida que avanza la temporada»… ** Los peloteros se toman un buen descanso cada tres outs, a menos que les toque batear. Los umpires no descansan durante los 54 outs, o más en los días de extra-innings…

       

Gracias a la vida que me ha dado tanto, incluso un lector como tú.

 

Jbeisbol5@aol.com

@juanvene5




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