El Barcelona ganó 2-0 al Betis este domingo en la primera jornada de la Liga española, regalándole el mejor homenaje a su ciudad, todavía conmocionada por los atentados del jueves, mientras el Real Madrid se colocó líder liguero al golear al Deportivo de la Coruña 3-0.
Un gol en propia puerta del rumano del Betis Alin Tosca adelantó al Barcelona(36), antes de que Sergi Roberto hiciera el 2-0 (38) en un partido que contó con grandes medidas de seguridad.
El encuentro se convirtió en un sentido homenaje a las víctimas de estos ataques con los jugadores del Barça luciendo el nombre ‘Barcelona’ en su espalda en lugar de su nombre, así como el lema «todos somos Barcelona» en el pecho.
«Hoy queríamos hacer un homenaje a todas estas victimas de los atentados, aunque fuera a nuestro modo: ganar el partido», dijo tras el encuentro el técnico azulgrana, Ernesto Valverde, en referencia a los 14 fallecidos y 120 heridos que dejaron los atentados en Barcelona y Cambrils.
Un sobrecogedor minuto de silencio, seguido por los gritos de «No tenemos miedo», dio paso a un partido completamente dominado por los azulgranas.
El Barça, necesitado de una victoria balsámica tras perder la Supercopa de España ante el Real Madrid, apenas dejó jugar a un Betis valiente.
El Barcelona salió a por el partido presionando muy arriba y recuperando los balones en campo contrario para buscar a sus hombres de arriba.
Sin el lesionado Luis Suárez, Leo Messi estuvo acompañado este domingo por Deulofeu y Sergi Roberto, que fueron una pesadilla para la defensa bética.
Tras una falta botada por Leo Messi al palo (35), Alin Tosca desvió al fondo de su propia portería un pase de Deulofeu hacia un internada de Messi (36).
Poco después, Deulofeu recuperaba un balón en la derecha para servir al punto de penal un balón que remató Sergi Roberto al fondo de las mallas béticas (38).
Con la ventaja en el marcador, el Barcelona empezó a jugar más suelto, aunque sin aflojar en la presión al Betis.
Tras el descanso, los azulgranas no cambiaron de dibujo y siguieron manteniendo el asedio sobre la portería contraria, aunque con menos intensidad.
