Médicos del Hospital Central de Valera explicaron que los signos de descomposición en la piel que presentó un niño de un año de edad, de acuerdo con una foto difundida, luego de colocarle una vacuna en el Plan de Inmunización 2017, fue una reacción a la forma cómo se aplicó la inyección y no a un problema del producto proveniente de la India.
Al bebé se le colocó la vacuna hace dos semanas y comenzó el efecto adverso. Los médicos han colocado antibióticos y tenían programado hacerle injertos de piel.
José Oletta, miembro de la Red Defendamos la Epidemiología, explicó que en la foto se observa que la aplicación de la vacuna es atípica porque se inyectó en la región lateral, y no en la parte anterior al muslo que es lo recomendado. Si la vacuna se suministró de manera intradérmica, y no intramuscular, puede traer complicaciones.
Hasta la fecha solo se han presentado casos de niños con hinchazón en la piel y alergias, pero son síntomas dentro de lo esperado.
“Sería injusto desestimar un programa de vacunación tardío por un hecho excepcional, pero el Ministerio de Salud debe informar para que el caso no genere alarma”, precisó el ex ministro de Sanidad. Y recalcó que no solo debe educar y promocionar la jornada, sino también vigilar los efectos secundarios.
Aunque precisó que puede haber una respuesta individual porque las reacciones ante medicamentos son variables de una persona a otra.
La jornada de Inmunización 2017 empezó de forma tardía y excluyeron vacunas necesarias para los niños como la antineumoco y rotavirus, fiebre amarilla y VPH. Esta última ya aprobada desde hace dos años, pero aún el Ministerio no la aplica.
