María
Victoria Santos || [email protected]
Desde el año 2000, Venezuela se ubica entre los
países con niveles de violencia “muy alta” en el mundo, destaca el informe
alternativo relacionado con el Derecho a la Vida en Venezuela.
Este trabajo, presentado a principios de junio por
el Laboratorio de Ciencias Sociales (Lacso) y el Observatorio Venezolano de
Violencia (OVV), intregrado por Lacso junto a un grupo de cinco universidades
públicas y privadas del país, fue consignado ante el Comité de Derechos Humanos
de las Naciones Unidas para la revisión del cumplimiento del Estado Venezolano
del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
Según
estudios y cálculos del OVV, durante 2014 hubo 24 mil 980 asesinatos en el
territorio nacional: la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes llegó a
82. La violencia homicida es la tercera causa de muerte en Venezuela; entre
1998 y 2014 se han cometido 231 mil 562 homicidios.
Esta
es la primera causa de muerte entre los jóvenes, mientras que la inseguridad
ciudadana constituye el problema social más importante que afecta a los
venezolanos.
El
panorama general de violencia en la sociedad trae consigo consecuencias más
allá de la muerte de miles de ciudadanos anualmente; pues conlleva
también personas lesionadas, secuelas físicas y psicológicas,
descomposición familiar, impacto en la economía familiar, en la salud pública,
pérdida de la calidad de vida o altos índices de migración.
Además,
los problemas de salud mental como ansiedad, depresión, estrés y paranoia se
han convertido en parte del día a día de los venezolanos.
Entre
todos los factores que originan la violencia (pérdida de mecanismos de control
social como la familia y la religión, desigualdad social, ocio juvenil…), la
impunidad es el que promueve con mayor fuerza la ejecución de delitos.
En 1998, por cada 100
homicidios se detuvieron a 110 sospechosos en Venezuela. Dos años después, en
el 2000, solo 18 sospechosos fueron detenidos por cada 100 homicidios. Esta
cifra solo ha logrado disminuir con el paso del tiempo: en 2007, 2008 y 2009,
por este número de homicidios fueron detenidos 9 sospechosos. Durante estos
tres años, 91% de los homicidas quedaron libres, sin haber sido detenido
siquiera como sospechoso.
Entre 1998 y 2009, de 123 mil 91
asesinatos, fueron detenidas 23 mil 46 personas. Esto quiere decir que más de
cien mil homicidas quedaron impunes.