A petición de Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos (Cavidea) y la Cámara Venezolana de Productores de Sal (Caveinsal) que han denunciado irregularidades en la calidad de la sal en el país, el gobierno fiscalizará el rubro.
El equipo integrado por el Servicio Autónomo Nacional de Normalización, Calidad, Metrología y Reglamentos Técnicos (Sencamer), Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde), la Superintendencia Nacional de Gestión Alimentaria (Sunagro) y el Servicio Autónomo de Contraloría Sanitaria (Sacs), tendrán la tarea de verificar y garantizar la calidad del producto.
Un total de 36 industrias salineras del país serán fiscalizadas, para verificar: permisología para el expendio del producto, capacidad de producción para evitar desabastecimiento y los estándares de calidad exigidos para este insumo, reseña La Verdad.
Sobre la denuncia presentada por Cavidea y Caveinsal, en torno al rubro limenticio y las industrias salineras, el gobierno destacó que existe la necesidad de verificar los estándares de calidad para evitar así posibles enfermedades.
El presidente de Caveinsal, Francisco Juaristi, afirmó que el objetivo de dar a conocer esta situación es comprender “que la sal que se expende en el país sea económica y de calidad para que todos puedan comprarla, no barata y de mala calidad y que no cumpla con las necesidades requeridas por el usuario”.
La directora general del Sencamer, Ana Ponce, aseguró “aquellos productores que incumplan con los permisos requeridos serán sancionados y no podrán ejercer su actividad económica.
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