Fue la primera película que utilizó el fondo de pantalla azul para mezclar imágenes reales y animación (Foto Archivo)
EFE
Fue la primera película que utilizó el fondo de pantalla azul para mezclar imágenes reales y animación y ganó cinco Óscar, pero si por algo se recuerda a «Mary Poppins» 50 años después de su estreno es por canciones como «Supercalifragilisticoespialidoso» o «Chim Chim Cher-ee».
Una historia fantasiosa, familiar y tierna que le dio a Julie Andrews su primer y único Óscar por el papel de una niñera de aspecto estricto pero llena de magia en su interior y capaz de transformar un mundo oscuro en un paseo lleno de color y música.
Basada en una serie de libros de la británico-australiana Pamela Lyndon Travers, la adaptación a la gran pantalla de las historias de la niñera Mary Poppins fue un empeño personal de Walt Disney, que tuvo que esforzarse mucho para conseguirlo.
Una batalla contra los requisitos disparatados de Travers que el creador de los estudios Disney ganó tras muchos intentos y que queda reflejada en «Savings Mr.Banks», una deliciosa película estrenada este año y en la que Emma Thompson interpreta a la escritora y Tom Hanks al prestigioso productor cinematográfico.
El amor que la escritora sentía por su personaje le hicieron rechazar en un principio todas las propuestas para la adaptación cinematográfica, en especial el hecho de que fuera a ser un musical y de que la película mezclara personajes reales con imágenes de animación.
La música fue elemento clave de una película que cuenta una historia tan poco original como efectiva: unos niños criados por un padre ocupado y estricto encuentran en una niñera mágica su válvula de escape y la mejor forma de enseñanza para toda la familia.
La música fue compuesta por los hermanos Richard M. Sherman y Robert B. Sherman, que consiguieron dos Óscar por su trabajo: a la mejor banda sonora y a la mejor canción original, por «Chim Chim Cher-ee».
Canciones inocentes y divertidas que encontraron su perfecto vehículo de lucimiento en la extraordinaria voz de Julie Andrews y en la cómica interpretación de Van Dycke.
La mezcla de humor, drama, historia familiar, amor y amistad hizo de esta película el mayor éxito en la carrera del director Robert Stevenson siendo la película más taquillera de aquel 1964.
JN