Casas inundadas, árboles caídos y calles anegadas fue parte de lo que dejó a su paso el torrencial aguacero del viernes.
En Mañonguito en Valencia, la crecida del río Cabriales afectó 72
viviendas. Unas 100 familias perdieron neveras, cocinas, lavadoras,
colchones, ropa, entre otros enseres. Cuarenta de esas residencias se
encuentran en zona de riesgo.
Marlene Chávez, vocera del comité de Salud del Consejo Comunal de
Mañonguito, indicó que fue elaborado un informe para solicitar la ayuda
al Gobierno regional.
También el Hogar Hispano se vio perjudicado por la crecida del río.
La mayoría de sus salones y canchas deportivas se inundó completamente
la noche del viernes. Jamín Verde, integrante de la junta directiva y
representante del comité de Migración y Bienestar Social del club,
exhortó al Gobierno local a garantizar la limpieza de los drenajes para
evitar estas afectaciones.
La vía hacía el Hospital de Carabobo y la Facultad de Ciencias
Sociales y Económicas de la Universidad de Carabobo, varios árboles
cayeron debido a los fuertes vientos y lluvia.
En la avenida Monseñor Granadillo cruce con Montes de Oca, en Los
Colorados, un poste de electricidad y un transformador se vinieron
abajo. Comunidades aledañas se quedaron sin electricidad.
La Alcaldía de Naguanagua habilitó cuadrillas de Fundanagua y el
Instituto de Aseo Urbano en conjunto con Corpoelec para asistir las
zonas que sufrieron los embates de las precipitaciones.