Beatriz Rojas/@rojas_beatriz
Al presidente de la Cámara de Comercio de Valencia, Guillermo Manosalva, no le alegró el anuncio del aumento salarial y del bono de alimentación. Considera que esto traerá como consecuencia más comercios cerrados y por consiguiente más desempleo.
De acuerdo a sus cálculos, a partir de ahora 10% de las santamarías cerrarán y 35% de los empleados del sector serán desincorporados de sus puestos de trabajo. Mientras que el sector de los servicios disminuirá 40%, por este nuevo aumento.
Considera que si para diciembre de 2015 habían cerrado 300 comercios en Valencia, de 18.500 que habían para diciembre 2014; y para junio de 2016 cerraron 200 más, calcula que para diciembre habrán cerrado 2000 comercios quedando 16.000. «Esto implica 6000 personas desempleadas», dijo.
Manosalva precisó que los incrementos que aprobó el mandatario nacional, no defenderán a la población de las mafias económicas y tampoco servirán para proteger el empleo, la salud y la educación de los ciudadanos.
En su opinión, esta decisión autoritaria inconsulta y hecha con mucha carga demagógica, populista y desesperación, pone en evidencia una ineficacia, ineficiencia y terquedad del Gobierno nacional para mantener un modelo económico fracasado, fundamentado en el Plan de la Patria, que no ha creado ningún bienestar ni progreso a los venezolanos y solo generará niveles de inflación superiores al actual.
Manosalva sostuvo que los aumentos acordados por el Gobierno, le comprobarán una vez más a los venezolanos que estas medidas no van a resolver el grave problema de producción, desabastecimiento y escasez que padece toda la población.
Citó que este es el tercer aumento de salario en el año y la inflación sigue galopante. “Decir que este aumento es para proteger el derecho al empleo, el trabajo justo, útil, bien remunerado y la defensa de la calidad del empleo de los trabajadores, que se lo están tragando las mafias en la calle, es seguir desconociendo la grave crisis en que estamos inmersos y la ineficacia de las medidas económicas que se han tomado hasta hoy”.
El dirigente gremial precisó que si el Gobierno no elimina la brecha entre los dólares de 10 bolívares y el de 680 bolívares, unificando el cambio, si no deja de producir billetes inorgánicos sin soporte productivo, si no abandona la falta de estímulo a la producción, y se deja de inventar modelos de distribución de productos básicos sin sentido y deja de inventar mecanismos manejados por personas sin ninguna experiencia que solo generan corrupción y exclusión, el país no va a salir del atolladero en que se encuentra.
