70% de los negocios ha bajado sus santamarías. (Foto Carlos Blanco)

Dayrí Blanco

El daño causado ha sido profundo. Ocho años continuos de una obra que debió ser entregada hace cuatro ocasionaron que el 70% de los comercios cercanos haya tenido que bajar sus santamarías. La quiebra fue la condena para estos negocios como consecuencia de los retrasos en la construcción de las estaciones de la Línea 2 del Metro de Valencia. La más reciente promesa indica que a finales de abril los vagones entrarán en funcionamiento en el primer tramo, pero eso no garantiza la reactivación del sector comercial.

En las adyacencias de la estación Rafael Urdaneta (Cámara de Comercio), funcionaban alrededor de 14 establecimientos. Actualmente solo tres abren sus puertas de manera intermitente. Mientras que en la Francisco de Miranda (Rectorado), la mayoría permanece cerrada, a excepción de unas cuantas oficinas privadas y negocios dedicados al ramo funerario siguen activos.

La drástica reducción de la avenida Bolívar Norte a un único canal en cada sentido y los obstáculos en la vía en que se han convertido las maquinarías y demás implementos utilizados en la obra han perjudicado dramáticamente la actividad comercial. Entre los planes de la Compañía Anónima Metro Valencia figura la restitución de esta importante avenida en unos dos o tres meses después de la entrada en funcionamiento parcial de las dos estaciones, pero eso no sera suficiente.

Escéptico y con poca fe. Así se mostró el presidente de la Cámara de Comercio de Valencia, Gustavo Sosa Izaguirre, ante las recientes promesas. A la caída en las ventas que se origino por la construcción, se le sumó la crisis económica que ha vuelto inviable la práctica de la actividad.

Más allá de la puesta en marcha de las estaciones hace falta la implementación de medidas que estimulen la producción nacional y que permitan la asignación de divisas necesarias para la importación de bienes y materia prima para la reposición de los inventarios.

El representante gremial lamentó que el sector no haya sido invitado a la inspección realizada la mañana del viernes y cuestionó que la entrada en funcionamiento se vaya hacer de manera parcial. “No conocemos la obra en su parte interna, pero por fuera se ve que la infraestructura de las estaciones no está lista”. Tampoco se mostró optimista ante la programación que indica que durante el primer semestre de 2016 se inaugurarán las estaciones Los Sauces y El Viñedo.

En enero fue la última invitación que se recibió en la Cámara de Comercio para conocer los avances de la construcción, pero fue suspendida y no se reprogramó.




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