El valor de la cesta venezolana se encuentra en 96,94 dólares. (Foto Archivo/El Carabobeño)
AVN
La cesta petrolera venezolana promedió esta semana 92,58 dólares por barril, lo que representa un aumento de 81 centavos de dólar, con respecto a la media de 91,77 dólares registrada entre el 25 y el 29 de agosto pasado.
Durante el transcurso de 2014, el crudo venezolano mantiene un promedio de 96,94 dólares por barril, y en agosto cerró con una media de 91,74 dólares.
Por su parte, la cesta de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep), de la que Venezuela es miembro fundador, tuvo un promedio de 99,36 dólares esta semana, lo que equivale a una leve reducción de 27centavos más en comparación con el período anterior, cuando alcanzó 99,63 dólares.
El Brent, de referencia en Europa, tuvo una media de 102,18 dólares por barril, para bajar 34 centavos frente al promedio de la semana pasada (102,52 dólares), y el West Texas Intermediate (WTI), en Estados Unidos, marcó un promedio de 94,96 dólares, lo que se traduce en un alza de 1,27 dólares respecto al precio de 93,86 en que cerró siete días atrás.
«Los precios promedios semanales mostraron un comportamiento mixto, determinado principalmente por datos económicos positivos en Estados Unidos, incremento en las tensiones geopolíticas, amplia oferta en los principales centros consumidores y las fluctuaciones del dólar», señaló el Ministerio para Petróleo y Minería en su portal web.
El comportamiento de los precios del crudo se vio afectado por las fluctuaciones del dólar y las esperanzas de que las conversaciones de paz en Ucrania puedan impulsar la demanda en Europa.
La divisa estadounidense registró máximos de 14 meses frente a una canasta de monedas esta semana.
Asimismo, el Departamento de Energía de los Estdos Unidos reveló que las reservas de crudo en esta nación disminuyeron la semana pasada en 900.000 barriles (0,3 %), para situarse en 359,6 millones de barriles, mientras que los analistas estimaban un retroceso de dos millones de barriles.
Sin embargo, varios reportes mostraron que la actividad manufacturera en Estados Unidos alcanzó máximos de casi tres años y medio el mes pasado, y que el gasto en construcción se recuperó con fuerza en julio, lo que ayudó a aliviar los temores a una desaceleración de la demanda de crudo en este país, que es el mayor consumidor de energía del planeta.
