Los habitantes de los municipios de Ragonvalia y Herrán denunciaron la situación. (Foto Archivo)
EFE
Campesinos del departamento colombiano de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela, denunciaron que «en confusos incidentes» con el Ejército de ese país, se derribaron tres puentes que servían como canal de acceso para servicios de educación, salud y actividades comerciales entre ambos territorios.
La Defensoría del Pueblo de Colombia indicó en un comunicado que su oficina en Norte de Santander recogió las denuncias de los habitantes de los municipios de Ragonvalia y Herrán.
Según la Defensoría, los lugareños denunciaron que «como resultado de confusos incidentes entre ciudadanos y miembros del Ejército venezolano, el sábado 5 de julio y el domingo 6, fueron derribados los puentes hamaca localizados en la vereda La Colina, a una hora del casco urbano de Herrán, así como en el sector El Oasis, a orillas del río Táchira».
El documento agregó que los «militares del vecino país también habrían sobrepasado la frontera para hostigar a los pobladores, según la versión suministrada por uno de los afectados al Comando de Policía en Ragonvalia, en la que se manifiesta que las puertas de varias viviendas fueron golpeadas por los uniformados».
La información recopilada por la Defensoría Regional da cuenta de la afectación directa e indirecta para 17.985 personas que residen en los dos municipios colombianos y en la localidad Rafael Urdaneta del estado Táchira, en Venezuela.
Con el derribo de los puentes se ven afectados cerca de medio centenar de estudiantes venezolanos que están matriculados en instituciones colombianas, que no podrán recibir sus clases como consecuencia del colapso de estas estructuras.
También seis profesores colombianos que estarían cursando su doctorado en la población de Rubio, al otro lado de la frontera.
El Defensor del Pueblo de Colombia, Jorge Armando Otálora, le solicitó a la Cancillería colombiana revisar las denuncias y adoptar las medidas que desde el punto de vista diplomático resulten pertinentes para salvaguardar los derechos de los ciudadanos y evitar una crisis humanitaria en la frontera.
