La bioquímica francesa Emmanuelle Charpentier. (Foto EFE)
EFE
La bioquímica francesa Emmanuelle Charpentier, galardonada junto a la estadounidense Jennifer Doudna con el Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2015, subrayó este jueves el «honor» y el «reconocimiento» que supone esta distinción a nivel personal y para la microbiología.
«Significa mucho para mí, es un honor y me conmueve mucho recibir este maravilloso reconocimiento», dijo en declaraciones a Efe Charpentier, científica del Centro Helmholtz de Investigación de Enfermedades Infecciosas de Braunschweig (Alemania).
Además del valor personal, consideró que el galardón «significa mucho para el alcance de la investigación, porque el premio reconoce verdaderamente la ciencia fundamental que está detrás de este descubrimiento».
La investigadora recibió el galardón Princesa de Asturias junto a Doudna por desarrollar una tecnología que permite la edición de genes y la manipulación de ácidos nucleicos con gran precisión.
Charpentier, que destacó la importancia para la ciencia de que los investigadores «colaboren nivel nacional e internacional», y Doudna fueron pioneras en aplicar una técnica denominada CRISPR-Cas9 que actúa como una tijera molecular para cortar y sustituir con gran precisión letras de ADN.
Según la bioquímica francesa, esta técnica supone «una gran esperanza» para la terapia génica y el tratamiento de enfermedades como el cáncer, la fibrosis quística o el Síndrome de Inmunodeficiencia Severa Combinada.
Los 19 miembros del jurado destacaron la «revolución en biología molecular» lograda por ambas bioquímicas y ensalzaron los avances científicos que han conducido al desarrollo de esta tecnología.
