Las compras de productos regulados disminuyen durante los
fines de semana debido a la baja disponibilidad en algunos comercios privados
de productos regulados. El sábado no fue la excepción en la red pública y privada
de expendio de alimentos.
En los supermercados Bicentenario de la avenida Bolívar y El
Trigal las colas se evidenciaron antes de abrir los locales. Pasadas las 10 am
solo quedaban pocos compradores esperando por ingresar y adquirir leche en
polvo, harina de maíz, detergente, arroz o aceite.
La situación fue distinta en la red privada. Solo en la zona
de Mañongo se observó gran afluencia de personas para adquirir otros insumos de
la cesta básica pero sin las habituales colas bajo el sol y a las afueras de
los establecimientos. La variedad de productos regulados fue insuficiente para
algunos. Ana Sánchez esperaba encontrar leche pero no fue así. No dispone del
tiempo que supone realizar la cola dentro de un abasto de red pública por lo
que sus hijos pasarán otro día sin el alimento.
Las colas en Makro San Diego alrededor del mediodía eras
kilométricas ante la oportunidad de adquirir dos bolsas de leche en polvo. Más
de 500 personas esperaban bajo el sol del estacionamiento para comprar el
producto además de harina de maíz. (LQ)
