Beatriz Rojas/@rojas_beatriz
Este viernes feriado lo aprovecharon desde la madrugada muchas personas para hacer las interminables colas en los alrededores de los supermercados donde se vendieron productos a precios regulados.
Los ciudadanos cuyas cédulas terminan en 8 y 9 tenían la posibilidad de adquirir los productos, pero todo parece indicar que la mayoría prefirió esperar en las afueras del supermercado Hyper Líder de San Diego, donde se ofrecía harina de maíz precocida, pasta, mantequilla y pañales desechables.
La espera en San Diego, bajo el inclemente sol. (Foto Luis Cabrera)
Como el nombre del comercio podía denominarse la «cola hiper», que se formó para comprar estos productos. Asombrados quedaban los usuarios de la avenida Don Julio Centeno, pues la fila llegaba a los bloque de Monteserino. Pasada las 11 de la mañana ya habían entrado al estacionamiento, para luego ingresar al supermercado, unas cuatro mil personas, según informó un efectivo de la Guardia Nacional, pero afuera esperaba un aproximadamente una cantidad similar y seguía llegando gente.
Señoras amamantando a sus hijos para luego intentar comprar. (Foto Luis Cabrera)
A las 11 y media salió Jenny Solarte con 4 paquetes de harina PAN. Estaba muy contenta porque había logrado la meta que se trazó a las 3 de la madrugada cuando llegó a hacer la cola. Más de 8 horas de espera para poder comprar la harina que le permitirá hacerle arepas a su hijos.
“Hice el sacrificio porque no tenía nada en la casa. Aunque sea con arepa pura uno resuelve”, comentó la dama.
No todos los que esperaban pudieron comprar en el Madeirense. (Foto Luis Cabrera)
En Valencia, concretamente en el Central Madeirense de la urbanización El Bosque, un gentío se aglomeraba para intentar comprar dos kilos de arroz y dos paquetes de detergente en polvo. En 2 mil bolívares salían los cuatro productos, pero quienes los pudieron adquirir estaban esperando desde la madrugada. Eran los mismos clientes de Farmatodo. En la mañana les llovió pero permanecieron en el sitio para no perder la cola.
La cola en San Diego daba a los bloques de Monteserino. (Foto Luis Cabrera)
