Las colas cada día son mayores. Se han intensificado con el
pasar de los meses desde que inició el año. No hay captahuellas, racionamiento
ni venta programada por terminal de número de cédula que haya funcionado. “Todo
ha sido un fracaso”, dijo Guillermo Manosalva, presidente de la Cámara de
Comercio de Valencia. Pero las comunidades no están de manos atadas.
Conjuntamente con la gerencia de supermercados y otros establecimientos se
prepara un proyecto de carnetización para evitar que revendedores que migran de
otras zonas hagan sus compras en esos lugares.
Las primeras reuniones ya se han realizado. Consejos
comunales de la parroquia San José, Naguanagua y San Diego han adelantado las
negociaciones. La idea es que se diseñe un sistema de identificación que
permita que solo quienes viven en las cercanías de los comercios adquieran los
productos. Eso erradicaría las colas. La atención a foráneos también está estimada,
pero solo algunos días específicos de la semana.
Manosalva dijo que existen las herramientas para implementar
el orden. “Se pueden redactar y aprobar ordenanzas municipales”. Pero hay
críticas. Los consejos comunales han sido denunciados de incurrir en venta de
cupos en colas. Para el presidente de la Cámara de Comercio, Fundacomunal debe
atacar esas irregularidades. (DB)
