AP
El venezolano Cristian Quintero
no sobrevivió el domingo a las semifinales de los 200 metros estilo libre,
su prueba favorita, en la que obtuvo el peor tiempo tras terminar último en su
eliminatoria.
Quintero había ganado su
eliminatoria por la mañana y avanzó a las semifinales con el 14to tiempo.
Por la noche, no obstante,
cronometró 1:48.00, el peor tiempo de los 16 nadadores que seguían en carrera.
El chino Yang Sun, que avanzó a
la final con el mejor registro, hizo 1:44.63. El sábado ganó también su
eliminatoria de los 400 libre, pero con el 33er tiempo y no pasó a la final.
El venezolano todavía tiene por
delante los 50 y 100
metros libre.
Quintero estudia y se entrena en
California, y no debe soportar las penurias de otros nadadores venezolanos que
deben sobrellevar la falta de recursos en un país sumido en una profunda crisis
económica, en el que escasea de todo.
Dijo que las naciones más
avanzadas tienen «otro nivel de desarrollo y los nadadores gozan de muchas
facilidades, no tienen que preocuparse de que si la piscina tiene cloro».
Quintero comentó que después de
los Juegos irá a visitar a su familia a Venezuela, adonde «hace años que
no voy. Quiero ver a mi abuelo de 92 años».
Cuando se le preguntó cuál era el
estado de la natación en un mundo donde abunda el dopaje, Quintero aseguró que
«siempre hay gente que quiere burlarse del sistema. Mi meta es ganarle a
esa gente sin extras».
«¿Vieron cómo miró Horton al chino ayer después de que ganó el oro
en los 400 libre?», preguntó el venezolano, aludiendo al australiano Mack
Horton, que no quiso saludar al chino Yang Sun, medalla de plata y quien estuvo
suspendido por dopaje hace dos años. «No hablo con drogadictos», dijo
Horton después
