Dorys López Villegas
De no ser tratados adecuadamente y especialmente recibir alimentos en envases adecuados y no en bolsas, los más de cien detenidos que permanecen recluidos en los calabozos de la Policía Nacional Bolivariana, en Valencia, podrían iniciar una huelga de hambre y sangre en los próximos días.
Así lo hicieron saber los familiares de estos privados de libertad la mañana de este lunes en las afueras de la sede de ese despacho policial.
Los declarantes denunciaron presuntos maltratos de los que han sido víctimas desde la noche del domingo tras un motín y durante mañana de este lunes cuando al parecer los reos fueron sacados al patio, presuntamente en ropa interior, y fueron golpeados.
Una situación irregular se habría originado en los calabozos durante la mañana pues vieron salir humo de bombas lacrimógenas, situación que alteró a más de un familiar y ante la amenaza de iniciar una protesta los uniformados de la PNB retiraron del área de espera a los familiares y desplegaron un cordón de seguridad, señalaron familiares.
Sobre la protesta que podrían iniciar los privados de libertad detallaron que estaría motivada ante la negativa de estos a recibir la comida en bolsas plásticas como aparentemente pretenden hacérselas llegar pues consideran que es una manera inhumana de tratarlos.
A esto se le suma hacinamiento que enfrentan los más de cien privados que están recluidos y distribuidos entre los seis calabozos de la sede policial.
Los denunciantes exigieron nuevamente la presencia de representantes del Ministerio Público, fiscales de los Derechos Fundamentales y representantes de los Derechos Humanos, para que sean los mediadores y logren escuchar sus quejas.