dpa
El escándalo por la restauración nada profesional de la máscara mortuoria del faraón
egipcio Tutankamón llevará ante un
tribunal disciplinario a 8 empleados del Museo Egipcio de El Cairo, informó
hoy la fiscalía en un informe.
Los acusados actuaron con «burda
negligencia» al pegar a las apuradas la barba de la máscara dorada,
que se había roto en agosto de 2014. Debido a ello, el tesoro de 3.300 años de
antigüedad sufrió rasguños. Entre los procesados están el entonces director del
museo y el ex jefe del departamento de conservación.
El accidente se produjo cuando la máscara de oro, de más de 12 kilos, tenía que
ser colocada de nuevo en su pedestal tras el cambio de una lámpara y la
barba ceremonial se partió.
Según la fiscalía, los acusados usaron
elementos cortantes para tratar de quitar los restos de la resina sintética
con la que habían pegado la barba.
Poco antes de Navidad la barba fue retirada otra vez con ayuda de expertos
internacionales y recolocada de forma adecuada. Desde entonces tampoco son
visibles ya los restos de pegamento en la pieza.
