Sara Pacheco
Las calles de la urbanización Tacarigua- Las Villas, parroquia Rafael Urdaneta, se asemejan. No por las construcciones o colores, sino por la cantidad de huecos que asoman en cada esquina. La situación ha sido denunciado por varios grupos de vecinos, quienes se han encargado de llevar cartas y comunicados a diferentes instancias encargadas de servicios públicos.
Dana Cumaná vive en el calle Occidente. Esta vía es ciega, pero diariamente circulan vehículos de los habitantes quienes se desplazan a sus trabajos o a cualquier faena. Contó que filtraciones de agua blanca han desencadenado los huecos que perjudican vehículos, además sirven como recipientes de agua pluvial.
“Algunas veces viejitos se ponen a pedir dinero para repararlas, pero es una tierrita que le colocan”. Detalló que cuadrillas de Hidrocentro acudieron a reparar las filtraciones y nuevamente “echaron una tierrita”. Esperan el asfalto.
En la avenida Paso Real en cambio, una boca de visita sin tapa afecta a los residentes con vehículos. Leopoldo López, vecino, afirmó que tuvieron que señalizarlo porque de noche, especialmente, no se ve. Esto ocurrió a raíz de un brote de aguas servidas que se extendió varias semanas, la filtración socavó el asfalto.
La avenida Urdaneta se mantiene peor. Esta es la salida de la urbanización, donde peatones y conductores sufren las deficiencias. Aguas servidas, terreno irregular y nivel alto de maleza son solo algunos aspectos que arropan este sector.