Dayrí Blanco
Era una caminata. Solo eso. Comunidades del sur de Valencia se habían organizado. La idea era manifestar públicamente por las calles de Miguel Peña la afectación directa de los pequeños comerciantes del sector tras la paralización de las plantas de Cervecería Polar. Pero no pudieron. El estado de excepción se los impidió.
Antes de las 10:00 a.m. del martes ya estaban en la avenida Las Ferias. Listos para iniciar la actividad hasta la plaza Bolívar de la parroquia. Eran solo 40 personas las que marcharían, y se encontraron de frente con 2 funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), quienes en una moto se paseaban por la zona en busca de la protesta.
Fueron pocas las palabras de los funcionarios. Indicaron a los representantes de las comunidades que debían suspender la actividad porque por el decreto de Estado de excepción están prohibidas cualquier tipo de manifestación de calle que altere el orden público.
Angel Moreno, líder comunitario de Miguel Peña, detalló que para evitar mayores conflictos decidieron retirarse del lugar y convocarán a una rueda de prensa donde expondrán la crisis que están pasando quienes viven de sus bodegas y abastos.