Victor Mooney posa para Efe en su embarcación de 24 pies. (Foto EFE)
EFE
El estadounidense Victor Mooney está ya listo en San Juan para emprender la recta final de su travesía transatlántica, que le llevará a recorrer a remo las Antillas Mayores y costear por el este de EE.UU. hasta su destino final, Nueva York.
Junto a su embarcación de 24 pies (8 metros) de eslora amarrada a uno de los muelles del Club Náutico de San Juan, Mooney, de 48 años, relató hoy en entrevista con Efe cómo llegó el viernes pasado a la isla caribeña y cómo prevé retomar su viaje a finales de esta semana en una aventura que, según dice, busca concienciar sobre el sida.
Su aventura comenzó el pasado febrero en las Islas Canarias (España) y desde entonces ha vivido situaciones que, según reconoce, «no han sido fáciles», entre ellas el ataque de un tiburón, lo que, entre otros efectos, le ha hecho adelgazar 80 libras (36 kilos).
«No ha sido fácil, pero le he pedido al Padre que me dé toda la fuerza y continúe dándome bendiciones. Sigue siendo un momento bien humilde y de verdad quiero terminar» el viaje, resaltó Mooney en lo que es su cuarto intento de completar una enorme travesía en remo y en solitario.
La nave en la que viaja Mooney, con dos hijos de 16 y 19 años de edad, fue fabricada en Río de Janeiro por el arquitecto marino Roberto Barros y está certificada por la Marina de Brasil para viajes transatlánticos.
«Es excepcional, ha funcionado bastante bien: Me trajo a Puerto Rico y espero que me lleve de regreso a Nueva York», asegura Mooney, que carga en su embarcación con dos galones de miel, tres rosarios y la Biblia, es el único libro que lee.
«Quiero llegar a casa», reconoce Mooney, que por fin ve cercano el final de una travesía de más de 5.000 millas (8.000 kilómetros) que emprendió como una particular forma de honrar la memoria de su hermano, que murió en 1983 a causa del sida. Otro de sus hermanos también es portador del VIH.
Esta aventura en solitario comenzó en realidad hace diez años en Senegal, cuando intentó por primera vez cruzar el Atlántico a remo.