EFE
En Panamá la evasión fiscal no constituye
delito, así lo aclaró este miércoles la fiscal general de ese país, Kenia
Porcell, y precisó que con el allanamiento a las oficinas del bufete Mossack
Fonseca se busca verificar «la posible utilización de la empresa para
algún tipo de ilicitud».
Porcell
reiteró que tienen disposición de la Fiscalía de brindar toda la colaboración a distintos países por el caso conocido como «Papeles de Panamá» y que así se lo ha hecho saber a sus colegas Perú, Venezuela, Guatemala, El Salvador y Costa Rica, aunque señaló que aún no ha recibido ningún requerimiento oficial.
El
Ministerio Público de Panamá «va a brindar toda la colaboración que se
requiera para aclarar este hecho y determinar si hay o no delito y, sobre todo,
que esto va a contribuir a limpiar la imagen del país», dijo Porcell.
En una
breve rueda de prensa, la fiscal general se refirió al allanamiento de las
oficinas de Mossack Fonseca a raíz del escándalo por la filtración masiva de
sus documentos, y cómo los medios del todo el mundo hablan de evasión
fiscal y de blanqueo de capitales como los delitos supuestamente
vinculados.
Con el
registro se busca «información, documentos, recolección de evidencia que
puedan acreditar la comisión de hechos punibles», sostuvo la fiscal
general.