Sara Pacheco
María Torres y decenas de habitantes más del municipio San Joaquín, se
levantaron más temprano de lo normal. Algunos ni siquiera durmieron. La mayoría
llega a medianoche a las colas que se hacen en el centro de la jurisdicción
para adquirir alimentos. A las seis de la mañana, milicianos les quitan las
cédulas para organizar la venta.
Al mediodía se las devolvieron. Una vez más les informaron que no se
venderían alimentos. La situación se ha repetido por dos semanas consecutivas.
Los habitantes decidieron no aguantar más y cerraron el paso vehícular de la
Carretera Nacional, a la altura de la escuela básica Pedro Gual. En al
menos 100 metros hay seis mercados.
(Foto Rafael Freites)
Yasmira Barreto explicó que el alcalde Charbel
Attieh, prometió que se regularizaría la distribución, sin embargo no ocurrió.
La últimas semanas solo ha llegado papel de baño y lavaplatos, aseguró Víctor
Pérez.
“San joaquín es un municipio olvidado. Cuando llega
comida igual no alcanza, si despachan 20 bultos de productos es mucho”, explicó
Torres. Un grupo nutrido se mantenía en la avenida exigiendo la presencia del
alcalde. Funcionarios de las policías municipal, de Carabobo y de la Guardia
Nacional Bolivariana llegaron a restablecer el orden y mediar con los
manifestantes.
(Foto Rafael Freites)
Mary Duno denunció que las bolsas de los Comités
Locales de Abastecimiento y Producción tienen tres meses sin llegar a varias
comunidades. El Carmen, El Remate, Maisanta y José Torres Gallardo, la
vieron solo una vez. En cambio, Mariana León aseguró que en Villas del Centro
nunca llegó.
Anteriormente los residentes podían viajar hasta el
municipio Guacara a adquirir algunos rubros, pues de acuerdo con Odalis Farías,
llegan más productos. Sin embargo, debido a las restricciones por sectores ya
no les es permitido comprar con la misma regularidad.
(Foto Rafael Freites)
