Dayrí Blanco | @DayriBlanco07

Los índices no ascienden por casualidad. Al menos no sucede así con los que develan el incremento de presos políticos en el país. “Es una consecuencia de la política de la represión aplicada por el Gobierno contra quienes se oponen a los que están aferrados al poder”, aseguró Iván Uzcátegui, presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad de Carabobo (FCU-UC). Los números así lo confirman: desde que Nicolás Maduro asumió la presidencia los casos de personas encarceladas por oponerse a su gestión férreamente han aumentado 573%.

Al momento de la muerte del presidente Hugo Chávez se contabilizaban cinco presos por razones políticas. Hoy hay 101. Es una realidad que alerta a la población juvenil del país que es, en su mayoría, la que se mantiene de manera activa en las calles protestando para exigir la activación del referendo revocatorio.

Pero más allá de las cifras el sistema judicial ha jugado en contra de quienes se mantienen tras las rejas por órdenes del Gobierno. “Más de la mitad no han sido procesados”, alertó la defensora de los Derechos Humanos, Marisol Hidalgo. Se aplica un retardo procesal para mantenerlos el mayor tiempo posible prisioneros.

Muchos de ellos ni siquiera han sido presentados en la audiencia preliminar que debe darse en un plazo que no debe exceder las 48 horas después de la detención. Es el caso de Lorent Saleh, quien está preso desde hace dos año sin conocer los delitos que se les imputan, mientras que Daniel Ceballos ya cumplió su condena y sigue tras las rejas por otra acusación cuyo juicio no se ha realizado, detalló Carlos Graffe, integrante de la dirección regional de Voluntad Popular (VP).

Generación de 2007

En 2007 surgió un movimiento estudiantil que hizo historia. Jóvenes de diferentes regiones del país tomaron el protagonismo de la defensa de la democracia cuando el Gobierno anunció que no se renovaría la concesión a Radio Caracas Televisión (RCTV). Desde Caracas Yon Goicoechea hizo sentir la lucha de cientos de universitarios en esa oportunidad. Hoy es parte de esa lista de 101 presos políticos.

Los denominados miembros de la generación de 2007 en Carabobo exigieron al Ejecutivo su liberación plena. Uzcátegui recordó que Goicoechea siempre llamaba a la protesta pacífica y que las autoridades no cuentan con ninguna prueba que lo vincule a algún delito. “Todo se le está sembrando”.




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