Marianela Ágreda Armas

Hoy salió el último despacho de la agencia de Cervecería Polar en su sede Turmero, luego que la planta San Joaquín paralizara la producción por falta de materia prima. La situación dejó a dos mil trabajadores de nómina diaria y 600 trabajadores de nómina mensual, solo de la red de distribución, bajo la figura de suspensión laboral.

Arquímedes Sequera, presidente del Sindicato Único de Trabajadores de las Bebidas Alimenticias (Sutraba), indicó que aunque el personal se retira a sus casas conforme a la figura establecida en los artículos 72 y 73 de la Ley Orgánica del Trabajo, pero se mantendrán en vigila en cada una de las instalaciones. “Esto por el anuncio que hizo el Estado que empresa paralizada, empresa expropiada, queremos seguir laborando y seguiremos pidiendo al Estado que entregue las divisas para la importación de la materia prima”.

El dirigente sindical recordó que en la planta San Joaquín paralizaron operaciones el 29 de abril, ya no se produce cerveza. En total son 21 agencias de distribución en la región central que la conforman los estados Carabobo, Guárico, Cojedes, Aragua, Bolívar, Apure y Falcón. Laboraron hasta hoy porque no hay producto para la distribución.

El dirigente sindical mostró su preocupación ante la paralización involuntaria, asegura que no tienen cómo producir. Sequera insistió en la liquidación de divisas, pues el país necesita producción y no empresas cerradas.

Sequera destacó que los trabajadores que quedan bajo la figura de suspensión laboral solo devengarán una compensación equivalente al salario básico “que no alcanza porque la inflación se devora el poder adquisitivo”. Lo que comenzarán a devengar los trabajadores durante los 60 días de suspensión laboral a la espera de materia prima, representa un 60 por ciento menos del salario. Aún así la empresa les asegura el pago de cesta ticket y la continuidad del HCM.

Nos preocupa cuánto tiempo estará parada la empresa, y tenemos que insistirle al Estado la aprobación de divisas, porque en la  situación entre empresario y gobierno los únicos afectados somos los trabajadores”.

Solo en la planta San Joaquín de Carabobo son mil 94 familias que quedaron bajo suspensión laboral y en toda la red de Cervecería Polar son 10 mil trabajadores directos y 300 mil indirectos.

Sequera señaló que se mantendrán bajo actividades como caravanas y pancartazos a fin de defender sus puestos de trabajo.

Apuntó que no estarán a favor de una expropiación y defendió los beneficios que Polar paga de manera puntual, una empresa donde según Sequera, prevalece el respeto, se tiene confianza y compromiso con lo que se hace. “La mayoría de las empresas tomadas por el Estado está cerrada. Es mejor nuestra empresa que caer en otras condiciones, porque no hemos visto la primera empresa expropiada que esté mejor”.




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