El cadáver fue hallado en bolsos de viaje. (Foto Nubia Reina)

Felícita Blanco

Funcionarios del Cicpc buscan a Cristian Alejandro Ordóñez (32), presunto implicado en el asesinato de Simón Antonio Perdomo Salazar (22), cuyos restos desmembrados fueron localizados la mañana del martes 22 en la calle Sorbona con avenida Beethoven, de Bello Monte, dentro de dos bolsos y un morral.

Víctima y victimario tenían tres años conociéndose y desde hacía cuatro meses compartían un apartamento alquilado en el centro de Caracas, al final de la avenida Baralt. Ordóñez labora en Pequiven y en una agencia de modelaje (exhibe pantalones jean y ropa intima masculina), pero está desaparecido. No ha vuelto a su trabajo.

La policía científica inspeccionó el apartamento 12, del edificio Pilar, ubicado en la esquina de Dos Pilitas, y no encontró al inquilino, pero colectó una serie de evidencias importantes para esclarecer el caso y la prueba de luminol resultó positiva. Habían lavado la sangre pero mediante el procedimiento mencionado determinaron que la sustancia estuvo regada por todo el inmueble.

El hombre es zuliano y sospechan que escapó a la guajira. Canceló su cuenta de Facebook, borró sus fotografías en todas las redes sociales, se llevó una laptop y el celular de la víctima, y volteó el colchón para ocultar las manchas de sangre. El Cicpc encontró un martillo ensangrentado.

Perdomo Salazar era veterinario, egresado de la UCV, y socio en una agencia de viajes. Anteriormente vivió con su familia en Caricuao.

Su hermana Floria Salazar dijo que nunca imaginó que Ordóñez pudiera ser capaz de matar a su amigo. “No aparentaba ser una persona violenta, agresiva. Se le veía apacible, de bajo perfil, atento, cariñoso”.

Los investigadores del Cicpc han ubicado a testigos, inclusive al taxista que trasladó a Ordóñez a las 4 de la madrugada, para abandonar los tres bolsos en Bello Monte, conteniendo la cabeza y las extremidades superiores e inferiores de la víctima.

Los restos no han sido retirados de la morgue, a la espera de recuperar el tronco del cuerpo de Perdomo y proceder a sepultarlo.

El joven tenía planes de irse a probar suerte en Argentina, porque un amigo se fue adelante y lo había entusiasmado, pero en ningún momento observaron molestia alguna por parte de Ordóñez ante el inminente viaje de Simón.




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