El principal ingreso económico de las fundaciones son las donaciones de empresas o particulares. (Foto Archivo/El Carabobeño)

Luisa Quintero || lquintero@el-carabobeno.com

Las condiciones todavía no están claras, pero la ayuda social permanece en incertidumbre ante el anuncio hecho por el presidente Nicolás Maduro, el cual implica que las fundaciones, cooperativas y otras asociaciones deben cancelar impuestos, situación de la que estaban exentas desde hace varios años por realizar labores en pro de la comunidad.

Luisa Rodríguez Táriba, presidenta de Funcamama, explicó que todavía esperan el análisis de abogados consultados, especialistas en organizaciones, para fijar una posición a la nueva reforma del Impuesto Sobre La Renta. Esta fundación dedicada a la lucha contra el cáncer de mama atiende mensualmente a cientos de mujeres que buscan ayuda para costear medicinas, consultas especializadas y apoyo o motivación de otras personas para superar la enfermedad que padecen.

La base que usan para mantenerse son las donaciones que realizan miembros, empresas o los fondos que logran recaudar en eventos como la Tertulia Rosa. Recientemente se inauguró un laboratorio para realizar exámenes sanguíneos a bajo costo, un proyecto planteado para que beneficie a las personas de bajos recursos, enfatizó Rodríguez.

La ayuda y protección a los animales tiene un puntal importante con Asoguau. La vicepresidenta de la institución, Maricinia Álvarez, mencionó que la contribución que realizan sus miembros es tan mínima que ni siquiera calificarían al pago de impuestos. Pero este tipo de decretos son malos para la lucha social porque no se incentivan las labores humanitarias en el país.

Álvarez recordó que se corre el riesgo además de perder los contribuyentes a las fundaciones, pues muchas habían promovido la contribución a causas sociales para disminuir los pagos finales de impuestos a empresas o particulares. No solo es afrontar la escasez de materiales y alimento para los animales sino que disminuyen los recursos para hacerlo.

En la Fundación Manos Amigas por la Vida también pasan por el proceso de discusión. Su presidente Eduardo Franco condenó la medida, pues este tipo de organizaciones hace el trabajo que el Gobierno nacional deja de realizar en pro de las personas con enfermedades o alguna condición en el país. Esperan sostener una reunión con todas las asociaciones que ayudan a las personas que viven con VIH/SIDA para fijar una posición unitaria con respecto al decreto.




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