Dayrí Blanco|@DayriBlanco07
Los números reflejan el fracaso de una medida política. El cierre de la frontera con Colombia ha provocado evidentes contracciones en la industria nacional. En Carabobo, quienes trabajan en la manufactura de calzados lo evidencian con una caída de 60% por la falta de materia prima.
En 2015 se lograron fabricar 16 millones de pares en la región. Pero este año el sector proyecta que se llegue solo a seis millones 400 mil. Mientras que en 2010 en todo el país se lograban hacer 30 millones de pares.
Wilmer Solano, secretario general del sindicato del calzado en la entidad, detalló que el repunte de la industria solo se puede lograr con la reapertura de la frontera que está por cumplir nueve meses clausurada, para evitar adquirir los insumos en otros países con precios más elevados.
Los incrementos en materias primas como suelas, gomas, botones y pegamentos son cada vez más acentuados, ya que se requieren hacer triangulaciones al comprar en China, y desembarcar el cargamento en Panamá para que posteriormente llegue a Venezuela.
Adicionalmente se debe lograr que el conglomerado del calzado funcione mejor, “la burocracia impide un mayor dinamismo”. Ese organismo fue creado en 2012 por la vicepresidencia para el Área Económica Productiva, para mejorar el suministro de materiales, y entregó 140 mil pies de piel, 348 metros de sintético y 144 mil kilos de hilo, con lo que se cubrió el 50% del mercado cuyo consumo es 90 millones de pares de zapatos partiendo de que la población en Venezuela se estima en 30 millones de personas y se le calculan 3 pares por habitantes. La mayoría de esos insumos se agotaron en agosto de 2014 y desde ese entonces no se ha recibido más nada.
