Daniel García Vargas
Pólvora extra… así se define la llegada del delantero colombiano, Jarlín Quintero, al Carabobo FC. Su mezcla de juventud y potencia lo hace una llegada que viene a refrescar un ataque valenciano que ya cuenta con nombres como Néstor Bareiro, Cristian Novoa, José Manuel Balza u Orlando Cordero.
La falta de gol ha sido el principal problema industrial en los últimos tiempos y es por ello que la directiva “granate” se ha enfocado en sumar varios elementos para facilitarle el trabajo al técnico Marcos Mathías. Ahora el estratega aragüeño tiene una pieza más para escoger en un nutrido ataque.
Quintero, de 22 años, se presenta como un joven aunque por sus pies han pasado balones propios y extraños. Ya ha jugado en América de Cali y Cúcuta Deportivo, del cual proviene, en su país. También, ha vestido los colores del Vitoria brasileño y es un viejo conocido en Venezuela al ser uno de los referentes del Aragua FC en la temporada 2014-2015 y concretar 12 goles.
El nacido en Magüi Payán, departamento de Nariño, firmó hasta el 31 de diciembre de 2016 con el Carabobo FC y se convierte en el sexto refuerzo del plantel tras Carlos Rivero, Aristóteles Romero, Yorwin Lobo, Cristian Novoa y Marlon Fernández.
“Vine con hambre y ganas de hacer las cosas bien para que Carabobo FC tenga una muy buena campaña, soltó el atacante al departamento de prensa. “Quiero hacer una buena sociedad en ataque para el beneficio del equipo”, agregó posteriormente. Por ahora deberá ponerse a tono en tiempo récord, debido a que llega con desventaja dado que la mayoría del grupo realizó la pretemporada y disputó los partidos amistosos.