Alfredo S. Flores
En el Mercado Periférico de Candelaria los alimentos ya no están tan económicos como antes, dice la señora Lourdes Gómez mientras observa los productos con recelo, pues se han vuelto muy costosos para su bolsillo.
El kilo de carne de res está en mil 700 bolívares, el de pollo en Bs 800 y el de cerdo en mil 500 bolívares. Comprar un kilo de cada carne cuesta Bs 4 mil, lo que equivale a gastar una cuarta parte del sueldo mínimo que se encuentra actualmente en 16 mil 399, incluyendo el bono de alimentación.
Tomando en cuenta esa cifra el sueldo apenas alcanza para comprar carne para el hogar solo cuatro veces al mes, sin incluir algún otro gasto. Con el bono de alimentación sólo se puede comprar carne una vez al mes, con el vuelto, dos mil 750, apenas se pueden comprar unas cuantas verduras.
Un kilogramo de cebollas puede costar hasta mil 200 bolívares. Otras hortalizas como el tomate tienen un valor de Bs 800 el kilo y el pimentón 700 bolívares. Si se suma un kilo de cebolla, uno de tomate y otro de pimentón el resultado sería dos mil 700 bolívares, si se le resta a lo que sobraba del bono de alimentación alcanza para dos pasajes, para salir y volver a casa.
Los granos rojos por kilo tienen un precio de mil 500 bolívares y las caraotas negras Bs. mil 200. Aún se pueden observar algunos locales con ofertas en las que se vende medio kilo de zanahoria, ají dulce o papas por Bs 200, pero cada vez son menos los mercados que se adaptan al bolsillo de los ciudadanos.
