El dirigente
de Voluntad Popular Salvatore Lucchese exigió al Gobierno
de Nicolás Maduro que dé una explicación al pueblo venezolano sobre el caso de
los 2 jóvenes detenidos por la DEA, capturados cuando negociaban la venta de
unos 800 kilos de presunta cocaína, que tendría EEUU como destino.
“Como
venezolano me siento afectado por no tener una respuesta oficial del Gobierno,
ya cuando han transcurrido más de 48 horas de la detención de estos 2 ciudadanos quienes dijeron ser familiares de la Primera Dama, Cilia Flores y
del Presidente Nicolás Maduro”.
Lucchese se
cuestionó la razón por la cual estos individuos tendrían en su poder pasaportes
diplomáticos al momento de ser detenidos por las autoridades
estadounidenses.
Recordó
además que no es el primer caso donde el país queda mal parado ante el mundo
por haberse convertido en un paso de la droga hacia EEUU y Europa, y donde
altos funcionarios venezolanos se han visto envueltos en denuncias y arrestos
por tráfico de esta naturaleza.
“¿Cómo es
posible que ni si quiera la Fiscalía General de la República haya abierto una
investigación certera sobre esto? No es posible que lo único que reine sea el
silencio permanente sobre hechos tan bochornosos para los venezolanos. Aunque
ya salieron algunos personajes del Gobierno a repetir la cartilla cubana
argumentando que todo lo que pasa es un plan en contra de la revolución urdido
por la derecha internacional, y todo eso que dicen para justificar sus
desaciertos”.
Lucchese
también exigió que, de ser ciertas las acusaciones hechas en contra de estas
personas, y de comprobarse el nexo familiar de estos jóvenes con la primera
dama y el Presidente, Maduro renuncie a la presidencia inmediatamente.
“De ser
cierto lo que se dice ya estamos hablando palabras mayores, no es solamente la
corrupción que esfumó los recursos provenientes de la mayor bonanza petrolera
de nuestra historia, estamos hablando del narcotráfico y todo lo que éste
genera. Ya hemos visto lo que produjo en Colombia donde los carteles del
narcotráfico sembraron de terror y muerte las calles de pueblos y ciudades
enteras. Ese es un espejo en el que no nos queremos ver reflejados”.
Prensa Salvatore Lucchese
