Daniela Ochoa denunció presuntas irregularidades en el recinto. (Foto Carlos Andrés Pérez)
El 10 de diciembre Daniela Ochoa llegó hasta la maternidad de Alto Riesgo Hugo Chávez, dentro de la Ciudad Hospitalaria Dr. Enrique Tejera (CHET), para ser atendida porque su bebé estaba naciendo antes de lo previsto. Llegó con una orden de cesárea del ambulatorio de Central Tacarigua y allí empezaron sus problemas. Denunció que dentro de la maternidad no se le ofrecieron a su hijo los mejores tratos y por eso murió.
Con solo 34 semanas y cuatros días, Ochoa fue ingresada pero los médicos solo se burlaron de la orden para cesárea que traía, por lo que aplazaron la operación. “Si me hubieran hecho la cesárea a tiempo quizás mi hijo estaría vivo y no hubiese agarrado la presunta bacteria que dicen que lo mató”.
La mala atención y los gastos impresionaron a esta madre que vive en Carlos Arvelo al igual que muchas otras. Comprar diversos tubos de ensayo, vasos con hielo además de pagar las pruebas es el pan de cada día que pasan los familiares o madres de los niños recluidos, detalló una madre que prefirió no identificarse. Preguntar por un recién nacido también es tarea difícil pues muchas veces dan largas y no dejan ver a los neonatos por su estado de salud.
A Ochoa no le supieron explicar dónde estaba su hijo. Presume que el tiempo que pasó sin saber de él ya estaba muerto. Su bebé nació con pulmones desarrollados según le explicó la pediatra de guardia, pero a los días tenía un aparato para ayudarlo a respirar. Se lo quitaron sin su autorización pues le dijeron que su bebé ya estaba cansado de luchar.
Se intentó contactar a las autoridades de Insalud para saber su posición sobre este caso, pero no se obtuvo respuesta. (LQ)
