Darío Sánchez García || dsanchez@el-carabobeno.com
Carros robados cuyos dueños no pudieron o no quisieron pagar los montos de extorsión por sus rescates han amanecido quemados en calles y avenidas del municipio Diego Ibarra.
Es una represalia para quienes no tengan o quieran pagar entre Bs 400 mil y 800 mil bolívares, para recuperar su carro pequeño o camioneta, según sea el caso, es la lectura que Javier Da Silva, responsable de Cuentas Claras en el municipio, da sobre el fenómeno de vehículos calcinados.
Suman al menos diez unidades en estas condiciones desde enero. Los últimos casos ocurrieron recientemente en las comunidades de Vista Alegre y Humberto Celli, en donde según Da Silva los vecinos vieron desde sus ventanas cómo unos hombres voltearon los carros y después los quemaron.
El vocero político apuntó que se hace entre las nueve y diez de la noche. Tampoco es a escondidas, añadió.
Omar Sequera, jefe de la Policía Municipal, confirmó la tesis en entrevista telefónica. Sí, los dueños que no pueden pagar pierden sus carros quemados como castigo, apuntó el oficial.
Sequera no descartó que los delincuentes emprendan estas medidas para vengarse de la policía, ante la creciente cantidad de vehículos recuperados en los últimos dos meses.
El director del organismo de seguridad adelantó que los armazones de los vehículos serán retirados con una grúa esta semana.
Javier Da Silva insistió en una mancomunidad entre los cuerpos de seguridad del Estado que operan en Diego Ibarra, Cicpc, Guardia Nacional, Policía Municipal y Policía de Carabobo, para atacar y resolver de raíz el problema.
Lamentablemente, no existe tal unión, criticó el declarante.
Omar Sequera exhortó a los vecinos a hacer denuncias anónimas a través del número telefónico 0412-741.89.38. Con la ayuda del pueblo y la disposición de la policía se podrá detener a los responsables de estos delitos, confía el oficial.